Hoy es mi despedida de soltera y la de Luciano; por culpa del ruso, vamos a tener nuestra despedida de solteros, pero por separados.
— Odio que te vayas con el ruso a quién sabe dónde — Luciano me sonríe y toma mi cintura.
— Amor, sabes que solo tengo ojos para ti.
— Más te vale, señor De Lucca — dejo un casto beso, pero somos interrumpidos por mi amiga Mila y Carlos.
— Bueno, futuros esposos, ¿se van a separar ahora? — Carlos toma del brazo a Luciano y Mila me toma a mí, llevándome lejos de él. Ni siquiera me deja despedirme.
— Amiga, Carlos y yo tenemos un plan — Mila me mira de forma pícara, y juro que eso me da miedo.
— ¿Qué estás planeando?
— Tú serás la despedida de soltero de Luciano. ¿Qué tal un baile privado? — Miro a Mila y el bombillo se me enciende.
— Eres una genia.
— Somos, Carlos dio la idea y yo la pulí.
— Bueno, ahora ayúdame, necesito ponerme algo bien sensual para mi futuro marido.
— Yo ya lo pensé — va a mi armario y saca un vestido bastante seductor con una lencerí