NATALIE
—Ya no hay manera de que huyas, debes decírselo.
—Estás loca, jamás lo haré —exclamo —Si lo hago lo perdería y eso nos destrozaría a ambos.
Estaba muerta de miedo, pensar que podrían apartar a mi hijo de mi lado me asustaba. Tenía que continuar ocultando la verdad todo el tiempo que fuera posible y si no tenía que elegir otra opción, desaparecer de nuevo de su vida y está vez sin dejar rastro de nada.
—¿Crees que él sea capaz de hacer eso?
—Ya no sé ni que