83. Voy a sacarte de aquí
CRYSTAL
Mi corazón se aceleró por un momento; nuestros ojos se encontraron y todo a mi alrededor desapareció.
Sin pensarlo tanto, corrí por el puente deseando llegar a él. Resbalé un par de veces hasta que, por fin, toqué tierra firme.
Un grito lamentable sonó del otro lado, aunque dudo que tenga algo de lamentable; si le prestaba atención, sonaba muy malévolo.
Llegué hasta Deimos, arrodillándome a su lado, lanzándome sobre su cuerpo cubierto de bruma. No me sentí inquieta ni incómoda cuando esta me arropó; sentí que eso, de alguna forma, era un abrazo.
—Estoy aquí, voy a sacarte de aquí—me retiré, observando las cadenas. Intenté tomarlas y como lo esperé, mis manos las traspasaron.
«De verdad estás aquí», alcé la mirada a sus ojos oscuros; no podía leer lo que había en ellos. Podría ser amor, odio, cualquier cosa.
—No podía dejarte ir.
Hubo silencio entre nosotros; él me analizaba y yo solo esperé a que terminara.
«No debiste haber venido, no cuando…»
Se acercó a mi vientre