78. Regresando
CRYSTAL
Desperté con el sonido de aves cantando y los rayos de sol iluminando una habitación extraña. El techo es completamente de cristal, permitiéndome ver el cielo azul, y en las paredes hay enredaderas con unas flores naranjas que brillan como si estuvieran en llamas.
Me siento en la cama, detallando lo que me rodea, todo mi entorno, mientras los recuerdos de lo que sucedió antes comienzan a golpearme.
Toco mi vientre asustada, pensando que lo peor había pasado y no, allí estaba mi pequeño, su corazoncito latiendo con fuerza.
Si no estoy muerta, ¿en dónde estoy exactamente?
En ese momento, la puerta se abre reflejando a una hermosa mujer. Ella sonríe, haciendo una reverencia, dejando una bandeja de comida a mi lado.
—Señorita, coma, es importante para su cuerpo nutrirse ahora que está despierta. Recuerde que lleva a un cachorro en su vientre.
—Espera— la tomé de la mano, evitando que se fuera. —¿Dónde estoy? ¿Qué es este lugar? ¿Cómo es que…? "Sigo viva".
—Coma primero, se