-¡James! La tormenta esta muy fuerte. Empeorara antes de que mejore
-Continua, vamos a lograrlo
El barco se tambaleaba
-¡¿Qué?! ¡No logro escucharte!
Las olas movían aquel barco como si fuera fácilmente hecho papel
-¡No te detengas!
James se asomaba al barandal
-¡No tan cerca podrías caer! ¡Todo esta mojado! ¡Cuidado resbalas!
-¡No lo hare!- entonces sus ojos azules se fijaron en el mar -¡Bruja! ¡Gran bruja del mar! ¡Te necesito! ¡Estoy dispuesto a hacer un trato!- y repetía esto tal y como lo habia hecho las anteriores veces.
Aiden hacia manubrios con el timón tratando de mantener en equilibrio el barco.
-¡No esta aquí! ¡Gira el barco! ¡Sigue en esa dirección!- señalo James
Aiden obedecía, era increíble que James no se hubiera congelado ya, la ultima vez el recuerdo de su pasado ya lo habria paralizado.
Al ver hacia el mar, y su fuerza, el dudo mucho que aquella bruja del mar siquiera apareciese, pero… se equivoco.
En todos los mitos y leyendas, existe algo de verdad, y existe un l