-Quizás deberías ser más cuidadosa con las cosas que dices… no sabes lo que eso significa, o estas pidiendo.
-Si lo se- le dice Kaia – te estoy regresando tu habitación.
-¿y?
-Y, te estoy diciendo que podemos compartirla
-…
-James- hablo ella seria – muchas de las cosas que haces es trabajar. Tienes bastante dinero pero sigues trabajando. No conozco a alguien que se esfuerce tanto como tu. Te vas desde temprano y llegas muy tarde. Eso hace que se limiten nuestros ratos de convivencia. Pero si estamos en la misma habitación, obligatoriamente tendremos que vernos. De mañana, tarde y noche- le explica -lo suficiente para crear un acercamiento mas real
-Pero aun así… ahora eres humana… y yo…
-¿Qué?- ella no lo entendía
-Eres consciente de que te acabe de decir hace unos días que me gustabas, ¿no?
Esta vez fue el turno de ella de decir-¿y?
-¿Y?- replico el pensando que esa era la obviedad mas grande del mundo
-¿Que con eso?
James sacude su cabeza frustrado -¿tengo que explicártelo?
Kaia ah