Cristal abrió ligeramente sus ojos para comprender que había vuelto de una extraña realidad o sueño. Esa misteriosa voz decía palabras sencillas pero difíciles de comprender para otros, aunque ella podía entender todo su significado. ¿Quién era esa extraña voz femenina? Todavía sentía un poco de confusión en su mente. Recordaba girar en todas las direcciones, donde creía que estaba la silueta de quien le hablaba, pero nunca pudo encontrarla.Cristal cerró los ojos recordando lo que se le había mostrado. Si ella no hubiera detenido a Kogan ese día, muchos hubieran perecido, como Ahir, Kalium y Clair. También recordaba cuando Kogan tenía la forma de esa temible bestia. Nunca tuvo temor, y lo único que prevalecía en su mente era poder detenerlo. En ese momento, un escalofrío recorrió su cuerpo al recordar sus terribles recuerdos, haciendo que ella volviera a sentir mucho miedo.“No temas, recuerda que él ya no volverá a lastimarte. Era necesario para que comience a controlar su gran pode
La conversación con John se prolongó más de lo habitual debido a las numerosas y precisas preguntas que él formulaba. Lynn se esforzaba por explicarle con detalle, reconociendo en él un vasto conocimiento en medicina.Después de finalizar el intenso interrogatorio, John continuó conversando un poco más con Cristal. Había logrado convencerlo de que su falta de comunicación se debía al mucho trabajo y a un pequeño accidente. Antes de terminar la videollamada, acordaron volver a conectarse más tarde para que Jilyan y Torik pudieran hablar con ella.Cristal se recostó entre las almohadas con un suspiro pesado. Si hubiera mostrado alguna señal de duda o si Lynn no hubiera investigado, su hermano podría haber comenzado a dudar de sus palabras. La luna sabía que también tendría que enfrentarse a la difícil tarea de comunicarles a sus hermanos que debía quedarse a vivir en Kanis. Era consciente de que se enfrentarían a su decisión y necesitaba encontrar una forma de explicarles que su lugar e
Cristal se encuentra sola en la habitación, finalmente sus pensamientos se centran en Kogan. Sabe que volver a tratar con él será incómodo, pero desea romper esa barrera. Cierra los ojos para sentir su vínculo, pero los nervios la invaden. La ansiedad se apodera de su cuerpo al no percibir ninguna emoción de su pareja. ¿Qué está pasando? ¿Por qué no puede sentir los sentimientos de Kogan? Ahora es Cristal quien tamborilea sus piernas, preocupada por la ausencia de conexión con su pareja. Mirando hacia la puerta, espera la llegada de Kogan, pero un repentino dolor en su hombro la distrae, haciéndola olvidar momentáneamente a su pareja.Inesperadamente, una ráfaga de aire recorre su cuerpo y una voz exaltada la sacude.— ¡¿CÓMO TE LASTIMASTE?! — grita Kogan con ceño fruncido y ojos centelleantes de preocupación.El estallido emocional de Kogan sobresalta a Cristal, sintiendo su corazón latir con fuerza en su pecho. Abre los ojos con sorpresa y se encuentra con el rostro enfurecido de Ko
Sam, Clair, Xander y Ahir estaban a unos kilómetros de llegar a la madriguera. En las últimas horas, habían avanzado con pasos ligeros. Aunque se encontraban agotados, la ansiedad por ver a su luna recuperada los mantenía sin deseos de tomar un descanso. Una expectativa palpable se reflejaba en sus miradas, pero ninguno estaba preparado para lo que estaba por venir.De repente, Clair detuvo su paso bruscamente, dejando tras de sí un rastro de tierra removida. Abrió sus ojos en asombro al percibir que el vínculo de la manada se estaba inestablilizando. Xander y Ahir también notaron esta extraña anomalía y se detuvieron justo detrás de su compañera. Mientras tanto, Sam, distraído por lo que percibía, se chocó contra un árbol frente a él.— ¿Qué es esto? —, preguntó Xander, con temor, respirando agitadamente, sin prestar atención a Sam, quien yacía en el suelo. — ¿Por qué mi cuerpo se estremece? —, mencionó, viendo cómo temblaban sus manos.— ¿Pícaros? —, soltó Ahir, quien rara vez habla
Los humanos viven sus días pacíficamente sin conocer todo a su alrededor, son seres insignificantes la realidad es que los hemos gobernados por siglos sin ellos saberlos. Nosotros los Licántropos tenemos el mundo a nuestros pies.Soy el Alfa Kogan, mi lobo se llama Rax, él no suele hablar, pero cuando toma el control es mejor que no estés cerca no le importa nada ni nadie y solo nos inclinamos ante nuestros padres.Estoy orgulloso de pertenecer a la manada más fuerte de todas los “REAL BLOOD” somos grandes, con gran fuerza y más destreza que las otras manadas, ni piensan en estar en conflicto con nosotros porque no quedará nada de ellos.Soy el mayor de 6 hermanos, no es normal que una pareja de licántropos haya concebido tantos hijos, mi padre le rogó a nuestra Diosa tener una gran descendencia él era el último Alfa de nuestra manada y no permitiría que nuestra sangre se perdiera.A cada uno de nosotros entrenó y preparó para ser los mejores Alfas, nos otorgó una parte de su extenso
Kogan Había un olor embriagador, una mezcla de rosas y un fino chocolate amargo “Mi favorito” por una parte el olor a rosas me apaciguaba y el olor a chocolate me excitaba. Controlaba mi inquietud, buscaba la fuente del aroma que apenas estaba en el ambiente, después de unos minutos ¡LO HALLE! — ¿Cumplió con tus expectativas? — me pregunto Hiro. — No tengo quejas — le respondí, sin ver el diseño al notar que las grandes hojas de plano sobre el escritorio tenían la exquisita esencia de mi pareja. — Fue hecho por la empresa MACRO — — ¿Cuándo fuiste por ellos? — — Esta mañana lo retiré con sus firmas antes de ir por ti — me informo — Me indicaste hace unos meses que les asignará este trabajo — — Los… recuerdo — mi mente vagó ¿Por qué no había sentido este olor antes? “¡VAMOS!” Me grita Rax golpeando con fuerza. “NO” le respondí, pero esa m*****a palabra era mentira, tenía la sospecha de que mi pareja era la causante de este aroma tan exquisito. — ¿Te pasa algo? — me preguntó H
Esa mañana Cristal caminaba en dirección a su cubículo después de dejar a sus hijos en el Instituto — ¡AL FIN LLEGAS! — se escuchó el grito de su jefe apenas la vio por el pasillo — Te están esperando hace unas ¡horas! — — ¿Quién espera por mí? — pregunto Cristal con duda. — ¡LOS HERMANOS REAL! — le informo molesto — Quiero que te disculpés por tu error de ayer — este hombre obeso de 56 años siempre que podía le gritaba a pesar que era una de las mejores empleadas. La empresa MACRO no tenía muchos años en el negocio el señor Isaac Miller era el jefe nombrado por los accionistas y no desaprovechó la oportunidad para demostrar su poder. — Ya me disculpé con ellos, pero me sorprende que haya llegado temprano ayer quedamos que nos reunimos al mediodía — le menciono ella. — ¡Vete a atenderlos! tienes otras inspecciones que revisar! ¡HOY! — le espetó molesto, Cristal suspiro sabía que la estaba castigando y a él no le gusta el hecho que ella era mejor que su hijo Isaac que era otro emp
— ¿Estás bien? — preguntó su hijo, al ver a su madre sentada en el suelo recostada del sillón toda sucia y tocando sus hombros del cansancio. — ¡Estoy agotada! — exclamó Cristal — Hoy tuve que hacer otras inspecciones a parte de las mías — dijo recordando que tuvo que ir a revisar los proyectos del hijo de su estúpido jefe. — Trabajas mucho — una voz dulce y de preocupación vino desde la cocina — Deberías tomarte unas vacaciones — le habló su hija, ella estaba consciente de todo el sacrificio que su madre había hecho por años. — Me encantaría irnos de vacaciones, pero tengo muchas responsabilidades — declaró. Cristal vio los rostros de sus hijos entristecerse, ella deseaba pasar más tiempo con ellos en la semana, los había visto muy poco y ese día en particular pensaba terminar temprano, pero como siempre el señor Miller tenía otros planes para ella. — Qué les parece si descansamos y mañana nos vamos a la playa — les dijo para animarlos y ellos rápidamente estuvieron de acuerdo.