Capítulo 49.

Antonio:

Estaba en la sala de espera, totalmente destruido, aún me aterraba la idea de perder a mi mujer y a mis hijos, paso exactamente una noche dónde ni Angelo ni yo pudimos dormir, mi patito tampoco quiso despegarse de nosotros, quería estar al lado de su mami, no pude dormir ni comer, toda la situación me tenía abrumado. De solo pensar en la idea de perderlos, me llenaba de rabia y miedo.

Tres horas más tarde llegó el doctor.

—¿Familiares de Anne Morrison?

—Aquí doctor —todos llegamos a el.

—Vine a avisar que pasamos a la señorita Morrison a cuidados intensivos y ya pueden pasar a verla pero sólo una persona puede entrar y estarán con ella solo unos minutos. —asentimos y el se retiró.

A los minutos llegó la enfermera a llevarse a uno por uno a ver a Anne, hasta que fue mi turno, quise pasar de último para poder descansar al salir, solo quería verla y que supiera que yo estaba aquí. Le pedí a la enfermera que me dejara pasar con Luna y accedió así fueran unos minutos. Caminamos
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP