Angelo:

Estaba sólo un poco nervioso de lo que hablaría con Anne, ya es tiempo que me abra a ella y entienda un poco más mi forma de ser. Me senté frente a ella para que pudiera escucharme. Esta conversación no sería nada fácil.

Solté un gran suspiro —Bien nena, es tiempo de que sepas algunas cosas sobre mi y algo que sucedió en el pasado que me había marcado, es un poco duro pero quiero que lo sepas.

—Voy a escucharte —tomó mis manos— no voy a juzgarte y lo sabes. —me dio un beso.

Bien Angelo es tiempo de que sepa de Luna.

—Bien.. —tome aire— después que te fuiste, yo hice algunas cosas tontas, era más joven e inmaduro, me gustaba tener sexo con muchas mujeres, eso era lo que hacía, estaba terminando de prepararme para tomar el mando de la empresa cuando a penas tenía veinticuatro años y Antonio veintiuno. —hice una pausa—. Una noche tuve sexo con una chica, estaba tan ebrio que no había medido las consecuencias, deje pasar ese momento.. Pasaron seis meses y aquella chica me había b