También decidieron que no habría una gran fiesta después de la ceremonia, sino una recepción más relajada y acogedora. En la lista de invitados Krislen invito a sus amigas: Isabella Romero y a Carol Luna que han estado en las buenas y en las malas.
— Brian, estoy emocionada por nuestra boda. Queremos que sea íntima y personal, rodeados de nuestros seres queridos.
— Sí, Krislen. No queremos una gran fiesta después de la ceremonia. Prefiero una recepción más relajada y acogedora.
— En nuestra lista de invitados, he incluido a mis amigas Isabella Romero y Carol Luna. Han estado conmigo en las buenas y en las malas.
— Me alegra que las hayas invitado. Será un día especial rodeado de amor y apoyo.
Krislen soñaba con un vestido elegante pero sencillo. Brian quería un traje clásico y cómodo. Juntos, fueron de compras y se ayudaron mutuamente a elegir la ropa perfecta para el gran día.
Brian y Krislen pasaron horas escribiendo sus votos matrimoniales. Querían expresar sus sentimientos más