Era la misma sonrisa que tenía cuando estaba feliz.
Si hubiera sonreído así antes, Javier habría dado un suspiro de alivio y habría acompañado a su hermanita en paseos, tomar fotos y comer.
Pero ahora, él se sintió raro.
Parecía que sabía lo que preocupaba a su hermano, Juliana suspiró.
Ella inclinó