¡Pum!
A la puerta del metro, antes de que Callero terminara sus palabras, todos oyeron un ruido.
Los demás echaron la mirada hacia el lugar donde sonó el ruido.
Vieron que Juliana tiró a Callero al suelo por encima del hombro.
Todo el mundo se cayó en el silencio.
Incluso todos parecían sordos que n