Juliana se volvió y al levantar la vista, vio el perfil bien definido de Mauricio. Asintió con la cabeza, con una tristeza en sus ojos que no podía disipar, y su mirada se desvió inconscientemente hacia la dirección en la que Diego había desaparecido.
—Mauricio, ¿sabes?
Mauricio siguió la mirada de