Val me mira, pero la verdad eso no detiene la pelea de magia que tiene con Miranda, pero, sin embargo, debe existir una forma de detenerla porque tampoco me quiero quedar de brazos cruzados sin hacer nada porque también me duele la muerte de Arturo.

—¿De verdad van a insistir aquí?—es lo único que les pregunto en este momento, aunque Val todavía mantiene el hechizo en su mano como si no se pudiera detener con todo lo que está ocurriendo.

—¡Que vas a entender! Se supone que los vampiros no deben tener emociones, pero no apuesto a que estás en el lado de Miranda porque ella es la amante de tu padre—suelta ese comentario lleno de lágrimas en sus ojos, sin embargo, no le hago caso porque tiene demasiado dolor en su alma.

La directora en ese momento se sienta mientras me acerco a ella para afrontarla con la verdad.

—De mí pueden decir muchas cosas, pero tú decides cuál creer.

Las palabras que dice en ese instante, no me dan miedo porque la verdad lo único que quiero es solucionar las c