23. Planes ocultos
Kaira, quien se encontraba detrás de la niña, intentó mantener la calma. Era claro que tenía miedo, pero no sabía exactamente a qué, sin embargo, no podía exponerla.
— ¿Qué ocurre Anika?—, preguntó poniéndose a su altura, pero esta parecía en shock hasta que solo movió la cabeza de un lado a otro sin poder emitir palabra, Kaira temía que volviera a perder la voz.
— ¿Ya están listas?—, preguntó Arin que recién llegaba sin enterarse de nada.
— Danos un momento, hemos decidido que el otro vestido es más cómodo, si quieres adelántate y ve al auto, no tardaremos mucho.
— Qué indecisas—, rezongo antes de irse.
Kaira entonces le habló a la niña con dulzura, — No pasa nada, tranquila, vamos a cambiarte de ropa.
— Humm…—, negó de nuevo con una expresión de miedo en su rostro.
— Vamos a continuar con el plan, hermosa, que nadie arruine nuestros planes, igual es mejor pasar el día fuera, ¿No lo crees?
— Sí—, respondió casi en susurro, estaba al borde de las lágrimas, así que Kaira supo que debí