27
~El punto de vista de Jack
La habitación parecía más pequeña, el silencio más denso mientras Mara y yo estábamos sentados, uno al lado del otro, apenas nos separaba. Podía oír su respiración, superficial e insegura, pero no se movió. Se quedó quieta.
Sin pensarlo, la alcancé, ahuecando mi mano sobre su mejilla, rozando su piel con mi pulgar. Sus ojos se abrieron de par en par, y por una fracción de segundo, pensé que se apartaría y me diría que esto estaba mal, pero no lo hizo. Simplemente me miró, con los labios ligeramente entreabiertos y la respiración acelerada.
No sabía qué hacía. Quizás era el alcohol, quizás la soledad que me había estado carcomiendo durante días. O quizás era su mirada, dulce, llena de algo que no lograba identificar. Pero en ese momento, me incliné hacia ella, acortando la distancia entre nosotros.
Mis labios rozaron los suyos suavemente al principio, probando, esperando su reacción. Pero no se movió. No se apartó. En cambio, dejó escapar un suspiro suave,