El procedimiento no toma mucho tiempo, pero cada segundo parece una eternidad. Dejo el test sobre el lavabo y me siento en el borde de la bañera, mirando el pequeño dispositivo como si fuera una bomba a punto de explotar.
—¿Ya? —grita Thea desde el otro lado de la puerta—. ¿Qué dice?.
—¡Aún no lo