—Dorothea, mi mejor amiga, está desaparecida —respondo —. Esta de aquí es su abuela quien ha venido a buscarla porque pensaba que estaba conmigo.
—Desaparecida es una palabra muy fuerte —interviene Margaret, con un tono casi burlón—. Seguro está con algún hombre por ahí, divirtiéndose como de cost