*Maxwell*
Sé que se había molestado, yo deseaba ese beso tanto como ella, pero no quería adelantarme a los acontecimientos. En realidad, ese momento era especial, ella y yo solos en la nieve, disfrutando el uno del otro como si fuéramos unos simples niños, quería verla así por un momento, feliz. Si hubiera llegado a besarla tendría que volver a lidiar con sus sentimientos, confundida entre si me quiere o quiere a Tyler, pero yo sé lo que de verdad siente su corazón y es a mí a quien ama.
Cuando se fue corriendo por las escaleras noté lo mucho que se había molestado, pero no tenía otra opción. Entré a la sala dónde se encontraban mis padres pasando la tarde como de costumbre.
— Hijo… —dice mi madre—. ¿Qué le has hecho?
— ¿Qué le he hecho a quién? —me hice le loco.
— Sabes perfectamente de lo que está hablando tu madre —dice papá.
— Cosas nuestras que no os concierna —no tengo porque darles explicaciones.
— Maxwell —sé lo que iba a decir mi madre, pero la detengo antes de que hablara.
—