_No puedo más... - susurré.
_ estuvo bueno, pero no fue suficiente. - dijo mientras marcaba mi piel con sus labios.
¿ toda una noche no le bastó? ¿que clase de monstruo era?
Su miembro parecía volver a moverse cuando la puerta sonó de nuevo.
_¡agh! - profirió con verdadera molestia
Salió de mí y un calambre doloroso me hizo gemir. Se colocó la bata la cual en algún momento de la noche se había quitado y lanzado al suelo, luego procedió a salir caminando hacia la puerta. Yo simplemente no pude permanecer más tiempo consciente y caí dormida de forma instantánea.
Cuando desperté, ya era tarde y el sol comenzaba a ocultarse. Tardé un momento en volver en mi, y al darme cuenta de que estaba anocheciendo me asusté. Me levanté inmediatamente pero las piernas me fallaron y mis rodillas golpearon el suelo.
_aaaahhhggg! ¡mierda! -grité por el dolor.
De inmediato la puerta se abrió y entró Emilia junto a otra mucama. Ambas me ayudaron a parar y me devolvieron a la cama, la c