“En ninguna cosa la infidelidad es más innoble y repugnante que en el amor”
Sören Aabye Kierkegaard
La noche fue larga para Karem, por momentos pegaba un ojo e inmediatamente daba un brinco para saber si Virginia la necesitaba. Cada media hora, se levantaba e iba hasta el cuarto.
Virginia a ratos se quejaba, Karem revisaba si temperatura con la mano. Le daba un poco de agua y la veía dormirse. Regresaba al sofá y volvía a dormir unos diez minutos.
Finalmente vio, que pronto amanecería, se levantó y estiró por unos segundos. Fue hasta la cocina y puso la cafetera a andar. Camino hasta el cuarto de su amiga, parecía profundamente dormida. Tocó su cuello y brazos. Ya la fiebre habría bajado. Tenía que volver al apartamento para cambiarse e ir al trabajo. Mas, le preocupaba dejarla sola. Decidió entonces, lo que había estado evitando. Tomó su celular y marcó para hablar con Camila.
Dejó que repicar varias veces, pero ella no contestaba. Qui