Capítulo 33. ¡La hija de Robert!
Brad:
En la mansión Smith, en Ciudad Frontera...
—¡Brad! ¿Qué pasó? —me interrogó Charlie, anonadado, ante mi grito desgarrador.
—Supuestamente, secuestraron a Jenny —contesté, volviendo a hablar con el Director, tratando de dominar mi desesperación.
»¿Estás seguro, que es ella? —Pregunté— Yo la dejé en toda la puerta de la clínica, hace más de tres horas —argumenté rechazando la idea del secuestro, pero tomando medidas rápidamente.
—Al parecer un hombre llegó a la recepción, hace más de una hora y preguntó por ella. La recepcionista le llamó, al bajar Jennifer e identificar al hombre, salió de la clínica, discutiendo con él —aseguró el director.
»Algunos pacientes, que en ese momento llegaban, vieron como la desmayaron y la metieron en una camioneta, negra de vidrios ahumados.
—¿Tomaron el número de placas de la camioneta? —interrogué, haciendo señas a Charlie, para que mueva cielo y tierra para ubicar a mi mujer.
—No —respondió el director— que yo sepa, no.
—¡Esto no me puede estar