37. Final
-Alteza yo no sé… no se si debería- respondió el aun sorprendido guardia
-Amara, creo que deberíamos esperar, o avisar a los reyes y tus papas, -Interrumpió Lynette preocupada- tu no deberías, tú tienes que…
-Me parece muy bien, tu haz eso… avísales, yo voy a ver quienes son- dijo saliendo a toda prisa, con la espada del guardia a quien prácticamente le arrebato el arma.
Lynette vio preocupada, a su sobrina salir del salón, rápidamente se giró y corrió hasta donde estaban los reyes y Alastar, todos estaban muy sonrientes celebrando y bebiendo, de hecho, parecía que el rey Henry y Alastar ya estaban pasados de copas, con sus rostros enrojecidos y los ojos brillosos.
-Qué pasa? - pregunto Alastar intentando ponerse de pie sin éxito, se preocupó al ver llegar a Lynette pálida y agitada
-Hay un grupo de personas que dicen ser familia, intentado ingresar…
-Como que familia? ¿Familia tuya? ¿No estaban todos muertos? - exclamo Alastar, ahora si poniéndose de pie.
-No, bueno, no lo sé,