Habían pasado un par de meses desde aquel suceso donde en el primer día de actividades, un cachorro fue casi asesinado por un puma, desde ese día a los cachorros les contrataron maestros de idiomas, cultura general matemáticas y tecnologíaLos lobeznos pasaban ocupados en sus lecciones y tareas, ya no tenían tanto tiempo para hacer travesurasEsa mediodía, Isabella discutía con su Alfa, le había azotado la puerta del despacho, en una de las reuniones, una irrespetuosa loba se le había acercado con intenciones dudosas, eso habia puesto a Isabella muy celosa, por el embarazo su carácter estaba muy cambiante, ella subió a su recámaraEl beta estaba llegando a entregarle unos documentos al Alfa, escuchó el portazo desde lejos— ¿problemas en el paraíso? ¿qué le hiciste a Isabella? Un poco más y tira la puerta— ¡Esa luna mía cada día está más insoportable, una loba me tocó el brazo y ahora creé que yo disfruté ese toque y me está acusando de ojos alegre! ¿lo puedes creér? — ¿y... lo disf
La familia Salvatore y el beta de la manada, salieron por fin del territorio Luna de Plata, Isabella iba muy contenta admirando todo el paisaje, Luciano conducía, ella lo miraba de vez en vez, se miraba tan apuesto, él por supuesto sentía su mirada sobre él, eso le gustaba Los cachorros iban atrás con él tío Camilo, ellos lo observaban detenidamente, así eran ellos, un poco extraños— ¿Qué pasa cachorros? ¿por qué se me quedan viendo así? seguro que algo les está pasando por su pequeña maquiavélica mente— Tío Camilo, ¿trajiste algo para comer? tenemos hambre, queremos una golosina— ¿Qué no tienen padres? es a ellos a quienes tienen que pedirles de comer, yo solamente soy su tío y el beta de su padre— ¿Pero... traes comida? — Landers siguió insistiendo, podía oler algo en la maleta de mano del lobo— Ahss... está bien, aquí traigo unos sandwiches de pavo y unas gaseosasA los cachorros les brillaron los ojos, esa ave les gustaba mucho, era de sus favoritas, Camilo les dió bueno a c
Isabella, entró a la habitación principal del castillo, en ella Valentina, se encontraba en cama, había dado recién a luz, la cachorra tenía un mes de nacida, más el Alfa Lizandro, no la quería fuera de la cama hasta que el médico la diera de alta— ¡Isabella, que sorpresa, mira nada más esa bella barriga, con que el Alfa Salvatore, te volvió a hacer un cachorro, ¿eh? — Valentina, amiga, me da tanto gusto verte, déjame conocer a tu cachorrita! — Isabella, fue hasta el moisés, en dónde la lobezna se encontraba— Ella está despierta, acaba de comer pero no se durmió, es muy aguerrida— !Es hermosa, y mira, tiene los ojos de su padre y también tiene el color de tu cabello como Violeta! tienes que apartarmela para uno de mis hijos— Por la diosa, Isabella, si se la aparto a Landers, se la come y si se la aparto a Lucian, ese cachorro es muy frío, no quiero que mi pequeña sufra por amor— Bueno... quizás tengas razón, apartamela solo si ellos mejoran, sabes, estoy muy incómoda, no le quis
Una lujosa boda estaba a punto de realizarse, Isabella Montenegro, hija del Alfa de la manada Luna nocturna todavía discutía con su padre, ella no quería casarse con ese segundo principe que ahora se convertiría en Alfa después de la muerte de su hermano— !Padre, no quiero casarme, sabes que estoy enamorada de Alejo, él es el lobo que yo quiero, dile a la manada Luna de Plata que no vamos a cumplir con el convenio, que no me voy a casar con Luciano Salvatore! ¡Diles, papá! esto es un gran error, ¿sabes de la fama que tiene ese Alfa? dicen que no tiene corazón, que solo vive para entrenar a los guerreros y que es un loboriego, ¿qué me espera a su lado? ¡seré muy infeliz!La bella loba vestida en un costoso vestido de novia, lloraba desconsolada, la hermosa pelinegra de ojos azul mar, sentía que el corazón se le estrujaba, había mantenido un noviazgo en secreto con Alejo Villaseñor, el beta de la manada Lago de Luna, aunque ella sabía que esa relación estaba prohibida por qué ya estaba
Isabella se limpió las lágrimas para cumplir con la promesa que se le había hecho a Luciano Salvatore de desposarlo, inexplicablemente su loba Dayren no estaba triste como ella, parecía haber olfateado al lobo de Luciano y quería saber más de él, sentir más de élPor su parte el Alfa que ya se encontraba de pie en el altar, estaba conteniendo a su lobo, eran setecientos años de no haber encontrado a su luna y al parecer ahora la había encontrado en una loba que no lo amaba, amaba a otro y no deseaba casarse con él— ¡Deja de molestar Jhon, ella no puede ser nuestra luna, ¿qué no ves que viene a nosotros como si la fuéramos a matar? ella no nos quiere, está enamorada de ese novio suyo, el tal Alejo Villaseñor, que ni siquiera es un Alfa, es un beta y ni así nos prefiere, me rehúso a tomarla como mi alma gemela! ¡¿escuchaste?!Jhon... el poderoso Jhon por supuesto que no escuchaba, él estaba arañando las paredes del subconsciente de Luciano para salir a tocar a su luna, la loba de su lun
Los ahora esposos salian de la iglesia mientras los miembros de la manada aplaudían alegres por su unión, los ponía contentos que su alfa por fin hubiese encontrado a su pareja y fuese feliz, esperaban tener a una luna noble y sabia En el salón ya estaba todo listo para que empezara la celebración, el basto banquete, la orquesta, el mejor vino que tenían en las cavas de la familia Salvatore, la delicada decoración que parecía sacada de un cuento de hadas, todo era a la altura del matrimonio de tan importante Alfa Los esposos llegaron, Luciano ayudó a bajar del carruaje a Isabella, ella dudaba en darle la mano pero el lobo se la sostuvo, él era un caballero ante todo— Gracias — Isabella por fin había dicho algo dirigido a su esposo— Vaya, si hablas, vamos, tenemos que ir a la mesa principal, procura comportarte y no llorar por qué tendremos los ojos de toda mi manada encima, no quiero que se vea tan obvio que no te querías casar conmigo Isabella pensó de inmediato que la caballero
El alfa camino en dirección del aroma que su luna dejó a su paso, la distancia no era muy larga, hablaría con ella para limar asperezas, Jhon estaba muy molesto con el por su comportamientoArtemisa de la nada le salió al paso al Alfa, ella fingió estar complicada— Luciano, necesito que vengas conmigo, los centinelas vinieron a avisar de unos intrusos que llegaron al límite del territorio de la manada, seguro se enteraron de tu boda y quieren atacar para arruinarlaEl Alfa podía ver a su luna a la distancia, ella se veía triste, quería ir con ella, pero Artemisa fue muy insistente— Está bien, vamos, veremos qué tienen para decir los guerreros — el lobo pensó que se desocuparía lo más pronto que pudiera para así regresar a hablar con IsabellaLa reunión con los lobos se tardó más de lo que Luciano esperaba, ordenó que reforzaran los límites de su territorio, cuando se retiraron por fin, él quizo terminar la conversación con Artemisa pero ella fingió un mareo— Oh... está mareo de nue
La loba de color azabache, cubrió su cabeza con sus patas delanteras mientras lloriqueaba, la presencia de ese Alfa la atemorizaba, creía que iba a ser asesinada, en ese momento se arrepintió de haber salido a escondidas de la ceremonia, nadie vendría a salvarla, este era su finIsabella y Dairyn esperaban sentir el dolor de las garras de la bestia con los ojos cerrados cuando escucharon el feroz rugido y su pequeño cuerpo tembló, pero el dolor no llegó en cambio unas fuertes manos la le anotaron del sueño y la acomodaron en su lado derechoEl aroma inconfundible del Alfa Luciano Salvatore llegó a las fosas nasales de la loba, era su rey quien había venido a por ella, era por eso que lo sentía tan molesto, él probablemente la castigaría por tratar de escaparEl Alfa salió del bosque con la pequeña loba en brazos, ella movía sus patas traseras intentando zafarse del fuerte agarre de su esposo, chillaba, gruñía, y trataba de arañarlo o morderlo — ¡Si no te pones quieta lo vas a lamenta