Los Centinelas daban la bienvenida a su príncipe, ellos lo trataban con mucho respeto, lo vieron llegar con una hermosa mujer de piel rubia, cabellos claros largos y unos preciosos ojos miel
— Hola, estoy contento de regresar a casa, ella es Rocío, es mi mate — los cercanos lobos sabían que de los tres hermanos Masherano, Paolo, era el único que todavía no había encontrado a su pareja destinada, en verdad se alegraron mucho por él
— Por fin la ha encontrado, lo felicitamos sinceramente
El lobo asintió aceptando sus felicitaciones, tomó de la mano a Rocío y entró por fin con ella al hermoso y enorme castillo
— Paolo, no sabía que cuando venías a visitar el castillo te trataban como a un príncipe y como a una princesa, es... tan bello, mira cuantas antigüedades hay aquí — Rocío, estaba de un lado a otro, ella estaba impresionada por la increíble opulencia y lujo con la que el interior del castillo estaba decorado
Más de pronto, un hombre muy apuesto, muy parecido a Paolo, pero con