Capítulo 75. Lo legal no siempre es lo justo.
Cuando Julián llegó a la oficina los abogados lo estaban esperando con un poco de preocupación por sus últimas palabras, antes de llegar allí había llamado a la clínica y le dijeron que aun Aníbal no había reaccionado, sin embargo, eso no le impediría seguir avanzando para lograr su libertad.
Apenas entró a la sala de reuniones, Julián conectó el dispositivo extraíble en la pantalla que estaba en la sala de reuniones y sin dar ninguna explicación empezó a transmitir su contenido, cuando terminó posó su mirada en cada uno de ellos.
—¿Les parece suficientes pruebas? Si no, muy bien puedo seguir buscando.
Aunque sus palabras eran tranquilas y aparentemente no tenían nada malo, encerraban un tono de sarcasmo que los abogados entendieron muy bien.
—¿Entonces qué vamos a hacer? Consideraron mis palabras ¿Se puede o no? —preguntó y todos se miraron unos a otro, pero al final asintieron.
Los abogados accedieron, sabiendo que Julián tenía razón. Si esperaban a que Aníbal se recuperara, podrían