132. INFILTRADO
AMALIA
No me compadezco de ese desgraciado, si se muere, así nos ahorra todos los problemas y supongo que sería más sencillo ascender a Sacerdotisa.
“Estas son las habitaciones de la manada de Ajax” mi loba me dice lo que ya sé y me paseo por el pasillo delante de las puertas cerradas, con disimulo.
“¿Lo hueles o Kane?” Le pregunto, pero me dice que no.
— ¿Quería algo, señorita? – me pregunta una voz masculina de repente y me giro algo rígida para ver a uno de los guerreros de Shadow Hunters.
— Yo, no, no, solo, su Alfa me salvó de un ataque y quería agradecerle – me invento lo primero que se me ocurrió.
— El Alfa Ajax tuvo que salir por asuntos urgentes de la manada, no se preocupe, le doy su agradecimiento.
— Ah, ok, gracias – le respondo un poco decepcionada.
Me marcho aun mirando hacia atrás, bueno, al menos parece que pudo escaparse para curarse en un sitio seguro.
Camino hacia mi habitación y me doy un baño para quitarme toda la sangre.
Las imágenes de todo lo que sucedió hoy re