“Todos son una luna y tienen un lado oscuro que nunca muestra a nadie”.
Mark Twain
Cinthya
Escucho una voz que no lo logro identificar, no logro abrir mis parpados, quiero moverme, sin embargo, siento un peso que me lo impide.
Una cálida caricia siento sobre mi mano derecha. No sé dónde estoy, me esfuerzo por que mis ojos se abran. Cuando mi vista se ajusta a la luz, el rostro que veo primero me llena el corazón de alegría.
—Hola Cariño —¡Dios! La ternura con la que siempre nos ha tratado me hace retroceder y ser la una niña hija de papi.
—¿Papá…? —Trato de incorporarme y un dolor agudo se instala en mi cabeza, me mareo de inmediato me quejo.
—No te esfuerces cariño —Me ayuda acomodando una almohada debajo de mi cuello.
—¿Qué sucedió? —pregunto con una mueca de dolor.
—Tuviste un accidente, caíste desde un barranco.
De inmediato mi mente envía imágenes de lo ocurrido, es perturbador, esa sombra es real, deber ser real, lo último que recuerdo es ver a Raptor lanzarse contra esa cosa o l