Hada y Zared sabían que Estrella no era fácil de manejar. Lo que nunca imaginaron es que Estrella llevaría las cosas tan lejos como para llamar a la policía.

Esta situación se volvió de conocimiento público. También habían alienado por completo a la familia Burgos.

Hada sabía que no podía admitir la culpa. Si alguien descubría que había impulsado a su hija a hacer tal cosa, su reputación se habría visto arruinada y la gente la habría despreciado.

Así que, en su mente, Hada, maquinaba para que Caín asumiera la responsabilidad de esta situación y evitar que los problemas recayeran sobre ellos.

Los cuatro permanecieron en diferentes salas para facilitar el interrogatorio.

El oficial preguntó: —¿Qué sucedió realmente entre Caín y tu hija?

—Caín vio que mi hija no entendía las cosas, forzó una relación con ella, y ahora mi hija está embarazada, pero la familia Burgos no tiene la intención de asumir la responsabilidad—afirmo Hada, quien ya tenía una historia preparada.

Zared, al ver que Hada