En el camino de regreso, ambos se sentaron en el asiento de la parte de atrás. Claus, a manera de broma, preguntó a Estrella: —¿Te molestaste anoche?
La noche anterior, durante todo ese interrogatorio, Claus se dio cuenta de que Estrella se preocupaba por la presencia de Catalina.
Esto indicaba que Estrella definitivamente tenía sus propios sentimientos.
Así que, hoy, Claus le dio todo el respeto a Estrella, ignorando completamente a Catalina. También lo hizo para que Estrella confiara en él.
Los resultados fueron buenos. Catalina definitivamente no se atrevería a invitarlo fácilmente en el futuro.
Al escuchar estas palabras, Estrella frunció el ceño y dijo con voz quejumbrosa—Sabías que sería así, ¿verdad?
Cuanto más pensaba Estrella en ello, más se enfadaba, sabiendo muy bien cómo sería la situación.
Claus fue quien había insistido en ir a ver a Catalina, y si no lo hubiera hecho, lo que sucedió hoy no habría pasado.
¿Acaso Claus se sentía satisfecho al verla celosa y peleand