Luna Mestiza ES

Esta historia empezó hace muchísimas noches cuando todos los seres mágicos se mantenían sus relaciones con su propias especies, pero los más débiles empezaron a perecer y los más fuertes tomaron control del todo y de todos. Entonces la Diosa de la tierra y la Diosa de luna observaron algo fuera de lo común, que las lleno de esperanza sus corazones.

- ¡Solana, hija no te alejes! - «Oh mi madre es demasiado sobreprotectora, aun no entiende, que no soy una invalidad, el hecho de que, no pueda ver, no significa que no pueda valerme por mi misma, incluso puedo asegurar que veo mejor que ella, puedo sentir cada energía de este hermoso bosque»- Pienso mientras sigo avanzando.

-Tranquila mamá, no te preocupes- Se que de nada sirve decírselo, pero lo hago para que vea que estoy cerca y se sienta tranquila.

-Si me preocupo ¡Solana! No tienes idea como esta destruido el bosque por la tormenta, Hay muchos árboles caídos, te puedes perder- «Esta niña no piensa lo peligroso que puede ser, los astros anuncian cambios importantes, espero no nos afecten»- La madre de Solana la observa caminar entre las ramas caídas.

Pero la conoce bien, es una niña terca, independiente y fuerte. Cuando ha tomado decisión no hay quien la haga cambiar. Y como toda buena protectora ha salido a ayudar.

- ¡Cric, Cric!

- ¡Pio, pio!

- ¡Crac, Crac! - Escucho mis pisadas sobre las ramas rotas y hojas, los pájaros los escucho revoltosos, me imaginó que preocupados por sus nidos, los insectos no se quedan atrás. Puedo sentir como todo el bosque esta alterado.

Percibo varios olores unos exquisitos otros amargos, pero pronto llegan a mis fosas un olor a tierra mojada mezclada con olor a cedro, y almizcle. Puedo escuchar una respiración ruidosa y dificultosa. El olor se hace más fuerte a como avanzó.

- ¡Grrrs! ¡Largo de aquí! ¡Bruja! - Si esta mocosa piensa que voy a ser presa fácil por estar atrapado en este fango se equivoca. Le muestro mi peor mirada.

- ¡Disculpe señor! Pero me parece que esta en problemas- Sigo su voz para cercarme a él. Sin molestarme por su insulto.

- ¿A ti que más te da? ¡ALEJATE DE AQUÍ! ¡NO VES LO QUE SOY! te devorare de un solo bocado, si sigues avanzando- Le digo para ver si la asusto, porque por alguna razón esta bruja, no ha salido corriendo como lo hace todas las demás creaturas al verme.

- ¡Lo siento! Pero como guardiana del bosque es mi obligación brindar mi ayuda a quien la necesite, además, no soy bruja, soy hechicera en entrenamiento- Me le acerco tocando las ramas caídas siguiendo su respiración.

- ¡Estas loca mujer! Si sigues caerás al fango igual que yo, mírame mujer cuando te hablo- Ahora no puedo evitar sentirme preocupado por la chica que se me acerca como la polilla al fuego. ¿Acaso no ven el peligro? Para nada soy un ser amable o gentil. Y ella es tan hermosa.

-Sigue hablando y podré mirarte- Le digo al notar que se quedó callado al parecer no es tan inteligente, no sea dado cuenta que no puedo verlo. Pero en su voz siento preocupación. Por lo que seré cauta.

-Okey, debe haber algo malo en ti, las brujas no ayudan a los Oni- Le digo al notar mis sospechas de que había algo malo en esta chica. ¡No puede ver! Con razón no corrió como todas las creaturas mágicas, tengo una apariencia aterradora por lo que todos me temen, además saben los crueles que podemos ser. Al decirle lo que soy logro, por fin, que se detenga.

-Oni o no, no puedo evitar sentir que necesitas ayuda y la única forma de ayudarte es sacándote de donde estás- Continuó con cuidado sobre una rama puedo sentir su forma porque ando descalza.

-Ja, ja 

- ¿Tu ayudarme? Eres tan delgada como una pluma, ¿Cómo piensas ayudarme? ¿Dándome tu carne como alimento? No me alcanzarías ni como mondadientes- Me burlo de la hermosa mujer que esta frente a mí.

-Aunque no lo creas, soy, la mejor en mi clase en levitación, pero necesito sentir una parte de tu masa para levantarte. Una vez que lo hago usted me dirás hacía que lado quieres que deje su cuerpo- Toco por fin, lo que creo es una mano, puedo sentir su mirada sobre mí, avanzo hasta que me detengo en una de sus púas. Es evidente que su fuerza es descomunal.

Así fue como se conocieron, dos seres completamente diferentes, de especies diferentes, entre ellos primero nació una amistad, para luego convertirse en algo más. Un Oni por primera vez, se comportó dulce, gentil con otro ser viviente.

Sintió dentro de sus entrañas la fuerza del amor sincero y desinteresado. Se enamoró de la joven hechicera y ella a su vez pudo ver la nobleza del corazón endurecido por el rechazo y la ignorancia.

Ella se entrego sin reserva al ser más poderoso del bosque, en su vientre empezó a crecer un ser fruto de ese amor.

Las brujas oscuras vieron el nacimiento de este ser único e increíble, decidieron apoderarse de él, las familia de la chica al enterarse quién era el padre decidieron protegerla de todo y de todos los que quisieran hacerle daño, incluso de su propio padre.

Todo el clan se reunión, juntaron sus fuerzas para conjurar un hechizo protector contra otras brujas y todos aquellos que quisieran acercarles para beneficiarse de su poder.

Pero al estar terminando el ritual, fueron atacados por las brujas oscuras. La madre que todavía esta encinta huyo, para salvar su vida y la de su bebé. Gran parte de la familia sucumbió al ataque de las infames brujas oscuras.

El Oni uso todo su superioridad para tratar de ayudar, pero a pesar de todo su poder no pudo evitar el ataque de las brujas e ignoraba el paradero de su mujer. Así fue como hizo lo que jamás haría un Oni. Oró a los Dioses de la Naturaleza por ayuda.

-Soy la Diosa Selene, te ayudaré si me prometes que dejarás que una de tus descendientes se una a uno de mis hijos incluso los bendecirás y protegerás su unión.

-Sabes que los hombres lobo solo se unen con hombres lobos, si permito eso mi descendiente sufrirá mucho, además podría parecerse a mí, los hombres lobos son orgullos, altaneros y peligrosos. La rechazaran de inmediato por su poca belleza.

-No te preocupes por eso, el hombre lobo que escogeré para tu descendiente será un hombre excepcional, será el nuevo rey de los hombres lobos, y todo el amor que no has podido disfrutar ella lo tendrá.

-Así que el bebé que lleva en su vientre es una chica- Dice el Oni feliz de escucharlo.

-Si es una chica, pero no es a ella la que deseo para mi hijo, para eso pasará varios años. Las brujas oscuras han conjurado un poderoso hechizo para que no puedas encontrarlas. Para que no puedas ayudarlas. Yo te ofrezco protegerlas de las brujas oscuras pero no puedo ayudarte a reencontrarlas.

-Acepto el tracto pero no permitas que le hagan ningún daño ¿Qué puedo hacer? Mi poder no es omnisciente, estoy limitado, desperado- Me humillo como nunca pensé que lo haría.

- ¿Gaia que haces aquí? - Escucho decir a la Diosa Selene.

-Veo que has hecho un tracto beneficioso para los tuyos, ignorando el dolor de este Oni, atrapado por el sentimiento más poderoso ¡El amor! No hay ser en el universo que pueda librarse de él.

-No importa lo que hagan conmigo, ella es diferente su corazón es tan puro y noble que fue capaz de amar una bestia como yo, solo le pido que la protejan de la gran magia negra, que mi descendientes jamás sean corrompidos por la oscuridad. Pueden tomar de mi lo que quieran

-Si permites que tomemos tu poder. No habrá quién autorice la unión.  En la tradición de ese clan un ancestro debe dar la autorización para tener la total protección del clan- Le dice Selene.

-Oni- Me llama Gaia- Si tomó tu energía quien cuidará de mis animales, plantas, el bosque mismo y de mis hijas las hechiceras de la luz. Incluso la mujer que amas es una de ellas. No me mires así ¿No me digas que no lo sabías? Ella en este momento ora con todas sus fuerzas por ti. Su amor hacia ti es tan fuerte que a ablandado a la misma tierra - Gaia cierras los ojos percibiendo la esencia de la chica

-Por amor a ella te ofrezco un tracto, cuida de los seres del bosque que dejare a cargo de las brujas de la luz, tú eres inmortal pero mis hechiceras no, ella pide que tome su vida a cambio de poner tu vida y la de bebé a salvo.

- ¡No! ¡Por favor, Diosa Gaia! Toma la mía a ella no la escuches ¡Por Favor! - Estoy aterrado siento que muero al conocer la angustia de Solana.

- ¡Tranquilo Oni! Los dos están tan desperados en ayudarse que no ya no saben ni que está pidiendo. Pero has hecho un trato con Selene, además no has ganado merito para tener un premio tan increíble. Lo que voy a hacer lo haré por mi pequeña niña, no por ti.

Muchísimas noches después….