VIOLET SWAN. OREGÓN–PORTLAND. ꘎♡━━━━━━━♡꘎Despierto bruscamente, como si hubiera recibido un golpe que me saca del mundo de los sueños. — Esto se ha sentido muy real — digo en un murmuro.Lo que al inicio era solo un sueño muy bonito, lleno de colores cálidos y sensaciones tranquilas, terminó convirtiéndose en una horrible pesadilla. Todavía puedo escuchar en mi mente los ecos lejanos de gritos que mi mente no recuerda lo que decían. Me incorporo lentamente sobre la cama, sintiendo el suave roce de las sábanas contra mi piel. Anoche no puse suficiente atención al lugar, estaba demasiado cansada como para fijarme en los detalles, pero ahora bajo la tímida luz de la mañana, decido tomarme el tiempo suficiente para admirar cada detalle de la habitación que me rodea. Las paredes son altas, de un sombrío, pero acogedor color marfil que refleja la poca luz que entra por el amplio ventanal. Afuera, el cielo se muestra gris, como si estuviera decidiendo si dejar caer

KATE CONNOR. ꘎♡━━━━━━━♡꘎ — Señorita, hay mucho que hacer y los contratos debieron ser firmados hace tiempo… — Solo retirate — respondo sin levantar la mirada, con una voz fría como el cristal helado — Una palabra más y serás despedida. No tengo tiempo ni ganas para estos asuntos, mi mente está muy lejos de los papeleos y reuniones. Lo que realmente me interesa es saber si vive… o al menos si está bien. — Si, señora — mi secretaria cierra la puerta tras de sí con sigilo, como si temiera romper el hielo con su sola presencia. Me quedo sola en la oficina, rodeada por paredes grises, muebles oscuros y ventanas que dan a lugares que ni me importan. El aire huele a café viejo y perfume caro, algo artificial, como todo lo que me rodea últimamente. En mis manos, el móvil vibra con una frecuencia casi cruel. Las imágenes que aparecen en la pantalla me llenan de rencor, dolor y tristeza en partes iguales. Cierro los ojos un segundo, tratando de contener la tormenta que siempre lat

El día ha sido una completa locura, una montaña rusa de sombras que se movían entre palabras calladas, miradas cargadas de pasado y verdades que nunca imaginé conocer. Cada paso que doy desde que salimos de casa de mamá, siento como si estuviera caminando sobre un hilo delgado entre el dolor y algo nuevo, algo que aún no termino de entender. Escucho el motor del auto apagarse y centro toda mi atención en Aarón, estoy tan cerca y al mismo tiempo todo parece distinto. Tan diferente al hombre que alguna vez conocí, aunque no puedo n2egar que estos cambios me gustan mucho. Su forma de mirarme ahora, su tono más suave, esa paciencia que antes no tenía conmigo, todo encaja como piezas que por fin han encontrado su lugar. — Ya estamos en casa, pastelito — dice de forma coqueta, apoyando su peso en mi asiento después de quitarse el cinturón de seguridad — Violet, ¿cómo te sientes después de verla? — pregunta mientras acaricia un mechón de cabello que luego coloca detrás de mi oreja. El r

⚠️Aviso por error publique mal el orden del cap 37 pido disculpas ⚠️ VIOLET SWAN. OREGÓN-PORTLAND. ꘎♡━━━━━━━♡꘎ Observo la venda sobre mi brazo y no puedo evitar pensar en Eric, no puedo simplemente sacar de mi cabeza que todo esto es mi responsabilidad. La tela blanca sobre mi piel me recuerda el lugar donde estoy, quién soy y lo mucho que he cambiado. Mis dedos rozan la tela suave por instinto, como si de alguna forma necesitara asegurar que está ahí, y que yo también lo estoy. — Con esto, tus heridas van a comenzar a sanar mucho más rápido, ese supresor retrasaba todo — dice la mujer de blanco, frente a mí. Su voz es profesional, pero lleva un matiz amable que no esperaba, levanto la vista hacia ella notando como sus manos se mueven con precisión, mientras guarda los instrumentos quirúrgicos. Es una mujer acostumbrada al control , la rutina y quizás también a ver cosas que prefiere no decir. — ¿Retrasar? — pregunto confundida. Según lo que me dijo Eric, era una buen

LILA WHITMORE. OREGÓN-PORTLAND. PASADO. ꘎♡━━━━━━━♡꘎ La casa está hecha un desastre, no hay ruidos fuertes, aún no se escuchan gritos, pero todo el ambiente parece estar roto. Los cojines del sofá esparcidos, papeles sobre el suelo, una lámpara hecha pedazos como si alguien hubiera estado aquí, sin intención de quedarse. Todo está completamente destruido. Se percibe en el aire un olor a tensión, casi nada se mantiene en pie y me quedo parada en medio del salón con el corazón acelerado, sintiendo una angustia creciendo en mi pecho. No puedo dejar que esto suceda, no de nuevo. — Ezra, cielo — digo, intentando mantener el tono de voz firme, aunque apenas si puedo contenerme — Lleva a Violet arriba, en un momento subo para colocarles sus pijamas y leerles algo antes de dormir. Mi hijo asiente obediente, aunque sé que no entiende muy bien lo que está pasando. Nadie debería tener que enterderlo, nadie debería vivir bajo la sombra constante y no quiero que vean el miedo que teng