Se quedó inmóvil ante el hombre que la esperaba. ¿Cómo demonios sabía dónde vivía o que ella iba a ir allí?Frunció el ceño. En esta vida, este bastardo era el que más detestaba. No podía pensar en tener un enemigo además de Ethan Rumero."¿Qué demonios haces aquí?", gritó Arianna, caminando hacia él y frunciendo el ceño con irritación."Esperándote. Llevo semanas esperándote. Me alegro de que hayas venido hoy", respondió Ethan con calma.Arianna lo miró con hostilidad. Esperándola, ¿quién demonios? "¿Te debo algo? ¿Por qué me estás esperando?", exigió con hostilidad."Al contrario, soy yo quien te debe. Te debo mucho y he venido a verte por eso", respondió Ethan. Al ver que Arianna no respondía, dijo con voz solemne: "Por favor, concédeme una hora, por favor, Arianna", suplicó."Bueno, no tengo tiempo que perder. Vete a la mierda de mi camino", tronó Arianna. No podía permitirse el lujo de perder el tiempo con este tipo."Por favor, Arianna. Solo esta vez y nunca más te molestaré", s
Leer más