*NARRA NICKI*A la siguiente mañana, el tono de mi teléfono me despierta de un brinco. Estaba teniendo el más placentero de los sueños, por supuesto, Nate estaba en él.Sacudo mi cabeza en un intento por borrar esas escenas de mi mente para concentrarme en la realidad. Tomo el teléfono y veo en la pantalla en nombre de Sol ¿qué hará la hermana de Nate llamándome a estas horas?Miro extrañada la pantalla del celular, ella jamás me había llamado ¿Habrá pasado algo? Sin más demora, tomo la llamada.-¿Sol? –le pregunto-¡Nicki! Hoy es el gran día ¿Estás preparada? –desde el otro lado del teléfono me transmite su emoción, está realmente agitada-¿Preparada?-Claro, hoy es tu cita con Nate¡Oh, es cierto! Pensé que eso también formaba parte de mi sueño, era tan perfecto que no parecía real.-Sí, tienes razón –le respondo-Pues levántate de una vez, Tina y yo te estaremos esperando en la plazaComo si no fuera suficiente revuelo en esta mañana, me suelta eso ¿Cómo sabe de Tina?

Me imposible no sentirme como una princesa en esta cita. Todavía no puedo creer que Nate me haya dado ese beso en medio de toda la multitud.Con lo pequeño que es este pueblo, estoy segura que mañana en la mañana ya todos se encontrarán hablando de nosotros y de ese beso entre los dos.El hecho de que me haya besado públicamente significa mucho para mí. Es la confirmación que había estado esperando durante lo que me parece demasiado tiempo.Es la seguridad de Nate hecha realidad, su convicción de que quiere estar conmigo sin importar el qué dirán, sin importar las consecuencias. Me acaba de demostrar que solo le importo yo y eso es mágico.Él se encargó de cerrar el patinaje con broche de oro gracias a ese tirón que me dio al aire. Tengo que admitir que, aunque me aterrorizó en su momento, ahora me parece una acción sacada de una película sinceramente.Acompañados de esos aplausos, Nate me tomó de la mano y me sacó de la pista. Nos montamos en su coche y fuimos directo a la casa.Por

Luego de tomarnos con calma todo el camino, finalmente llegamos hasta la escuela.-Te portas bien por mí ¿de acuerdo? –le digo luego de darle un suave beso en su frente y, luego de un último adiós, regreso a casaAl llegar al salón la tristeza me inunda un poco cuando veo que ya Nate lo ha recogido todo, no queda ni un solo rastro de lo que fue nuestra mágica noche.Evidentemente no podía quedarse todo aquí para siempre, pero pensé que tendría la oportunidad de volver a verlo antes de que lo quitáramos.Miro por todos lados y no lo veo, paso primero por su habitación, pero esta también está vacía, así que, bajo las escaleras y me dirijo hacia su oficina.Toco primero, no quiero molestarlo abruptamente si está analizando algún caso o algo así. Su voz seductora atraviesa la puerta:-AdelanteSuavemente, abro la puerta y mi respiración comienza a agitarse cuando lo veo vestido con todo su uniforme, es demasiado sexy, ahora entiendo por qué todas las chicas en el hospital estaban loca

Todavía me siento fuera de este mundo cuando me dirijo hacia la escuela de Alma a recogerla. Que alguien por favor me pellizque porque esto no puede ser cierto.-¿Cómo fue tu día hoy? –le pregunto después que llega hasta donde estoy corriendo y se abraza a mi cintura-Muy bien, pero podría ser mejor, ¿sabes cómo?-Con una maratón de Harry Potter los tres en el sofá del salón ¿a que adiviné?-¡Me encanta Harry Potter!-Lo sé, por eso lo había pensado ya ¿qué te parece?-Pero ¿papi estará de acuerdo?-Claro que sí y, si no lo está, lo convencemosMientras vamos caminadas tomadas de las manos, el calor se expande hasta el centro de mi corazón cuando escucho todas las anécdotas que Alma me está contando sobre el día de hoy.En verdad es como si me considerara parte de la familia, no estoy segura que piense en mí como una madre, ni como una sustituta de esta, pero sí está claro que me tiene mucho aprecio.Todo iba de maravilla hasta que entramos en la casa y nos encontramos c

A la mañana siguiente, me levanto temprano para encontrarme en la pista de patinaje con mis hermanos. Me he puesto hasta mi viejo uniforme, no puedo negar que, un aparte de todo esto me hace mucha ilusión, hace años que no juego y estoy ansioso por hacerlo.Jack y yo nos dirigimos hasta el centro de la pista donde, al comienzo del partido, tomo la delantera. Es bueno saber que la velocidad todavía forma parte de mí. Creo firmemente que puedo ganar esto.Cuando anoto el primer punto, la alegría me recorre por todo el cuerpo. Sí, todavía tengo mi toque. Me pregunto si Nicki vendrá.Ahora mismo me siento como el chico del instituto nuevamente, el capitán del equipo añorando que su novia venga a verlo jugar para dedicarle la victoria.No me queda de otra, tengo que poner todo mi empeño en esto, de este juego depende el futuro de la cervecería.Si Jack gana, tendremos que decirle adiós a todos los recuerdos que tenemos en ese lugar, a las tradiciones y, lo peor, tendré que darle la cara a