Sasha se miró en el espejo, no puede creer que en menos de una hora le estará diciendo 'Sí, quiero' a su novio adolescente, incluso si él no sabe que ella lo ama, incluso si sabe que es gay , todavía no podía evitar querer precipitarse por esa isla y gritarle al mundo que lo hacía.  Ella suspiró al recordar que él nunca la había llamado por teléfono para preguntarle cómo estaba.  Él nunca la había visitado, ese día de probar el vestido fue el último día que lo vió.

Tal vez las cosas cambien después de esta noche, tal vez finalmente comience a notarla después de sus votos, no debería olvidar que ella está tomando un gran riesgo al casarse con él, ¿qué mujer se casará con un hombre que es gay?  Debería estarle agradecido, al menos es por ella que su secreto permanecerá oculto.  ¿Puede ser ese el hecho de que aceptó casarse con ella, porque sabe que ella es consciente de su preferencia por los hombres y quería que ella le guardara el secreto?  Pero si es así, ¿cómo sabía él que ella estaría de acuerdo?

Su tren de pensamientos se arruinó cuando Vanessa y Angelica entraron en la habitación.  Había puro amor y adoración en los ojos de ambos, uno era azul cristalino y el otro gris, Sasha se encontró deseando poder ver un átomo de eso en el de su marido ardiendo.  Solo una pequeña emoción.  Ahora que lo pienso, no hay absolutamente nada que sepa sobre él.

Ella sabe que él es un multimillonario hecho a sí mismo, en la mayor parte de la riqueza de su padre, él todavía salió y se hizo alguien, muchos centros comerciales, clubes y compañías están a su nombre, pero él siempre fue invisible para el ojo público, apenas asistía  entrevistas.  Invitarlo a una fiesta tampoco fue fácil e incluso después de intentarlo y lo lograste, todavía tienes que preocuparte de que aparezca, lo que a menudo no hace y esa es la razón por la que ella no lo ve mucho, él es una especie de multimillonario fantasma, aunque sabe que él posee tanto, pero no puede señalar cuál es su propiedad.

-Eres hermosa-, felicitó Vanessa mientras Angélica sonreía orgullosa y se acercaba a ella, la ayudaba a ponerse el velo mientras Vanessa le entregaba una cajita, la abría para ver un collar de diamantes, por valor de unos millones de dólares.  Ella tragó y la miró -déjame ayudarte- le ofreció y le quitó la caja antes de ayudarla a ponérsela.

Sasha se volvió y se miró en el espejo, su cuello se había transformado repentinamente en el de una duquesa o incluso una reina, se veía exquisito -gracias- murmuró y sonrió.

-Tu coche ya está aquí, ¿estás lista?-  Preguntó su madre y ella asintió.  Las dos mujeres la ayudaron a subir al auto que la esperaba, ella se subió y les dijo adiós antes de que subieran a otro auto.  El comenzó a moverse y se encontró de nuevo perdida en sus pensamientos.  El mes pasado, todavía le decía a su madre que se casará cuando sea el momento adecuado y ahora aquí está, casándose y no solo con cualquier hombre sino con Michael Brown.

Ella sonrió y respiró hondo, ahora este es un paso gigantesco que está dando hacia una nueva fase de su vida que la arruinará o la hará la mujer más feliz del mundo.  Decidió votar por el más feliz, pero luego la voz le preguntó de nuevo, '¿estás segura?'  Pensó en cómo él siempre actuaba con indiferencia cuando ella estaba cerca.  Iban a casarse y se han conocido solo dos veces, primero fue cuando se conocieron, segundo fue cuando él la acompañó al centro comercial para probarse su vestido y el tercer día será hoy.

Su madre la había vuelto a llamar cuando quería preguntarle qué quería en su casa, no irían de luna de miel porque Michael dijo que tenía un contrato en el que estaba trabajando y que no podía permitirse el lujo de estar ausente, aunque prometió llevarla de luna de miel una vez que él terminara con el trato comercial.  Y sí, ella no lo escuchó de él personalmente, su madre había sido la que le había transmitido el mensaje.

Suspiró, tal vez después de esta noche, no volverán a haber mucho silencio entre ellos, 'sí, espero', dijo la voz de nuevo y lo rechazó, su matrimonio será perfecto, aunque su esposo ama a los hombres, lo hará.  sólo toma un momento para influir en su preferencia, para cuando ella le muestre lo que le falta a las mujeres.

Llegó a la iglesia y se abrió la puerta, su padre estaba a su lado en un instante, listo para acompañarla adentro.  Nicholas no pudo evitar elogiar a su hija por lo magnífica que se veía.  La acompañó al altar donde su futuro esposo ya estaba esperando, se veía tan fascinante con el traje blanco que se estaba poniendo, su cabello estaba completamente plano sobre su cabeza y brillaba como si estuviera mojado.  Sus ojos azules cristalinos la siguieron hasta que ella se paró a su lado, eso fue lo más que la había mirado, ella no se dio cuenta.

Su colonia viajó hasta sus fosas nasales y sintió que su mente giraba, ¿cómo puede oler tan bien?  Ella lo miró a través de la esquina de ella, pero su mente estaba fija en el sacerdote que estaba ocupado leyendo sus votos.

-Sí, quiero- , dijo.

-Lo hago- , dijo también.

-Por el poder que se me ha otorgado, ahora los declaro marido y mujer, ahora puede besar a su novia para sellar este voto- , dijo el sacerdote.

Sasha contuvo la respiración cuando él la miró y le reveló el rostro, ¿en realidad está teniendo su primer beso con él?  Pensó.  Bajó la cabeza a la de ella y tomó sus labios en un breve beso.  La audiencia aplaudió y ambos salieron con familiares y amigos para tomar algunas fotos antes de pasar a la recepción de la boda.

Todo salió según lo planeado, bailó con su ahora esposo y también con algunos de sus socios comerciales o amigos, ¿cuál?  Ni siquiera le presentó a una sola persona.  Bailó con su suegro y su padre.  La fiesta estuvo genial.  Más tarde, unos amigos los acompañaron a su casa para seguir bebiendo allí.

Algunos se fueron más tarde pero sus socios se quedaron, él estaba discutiendo algunos asuntos importantes con ellos que ella sentía que no tenían nada que ver con ella.  Decide subir las escaleras y prepararse para él.  Entró en su habitación y quedó cautivada.  Su suegra sí sabe cómo arreglar un dormitorio.  También le consiguió un tocador que tiene todo lo que necesita, incluida su crema facial, ¿es por eso que le preguntó sobre todas esas cosas?  Pensó.

Abrió el guardarropa y, como esperaba, había una pequeña bolsa empacada para ella, abrió la cremallera y salió de ella antes de entrar al baño con la bolsa.  Mirándose en el espejo, Sasha sonrió y se mordió el labio inferior seductoramente, tomó el limpiador de maquillaje que había traído al baño para limpiar su maquillaje.

Michael terminará en cualquier momento y vendrá directamente a la habitación, así que tuvo que darse prisa y vestirse de manera seductora para él.  Maldita sea, todavía no puede creerlo, ella, Sasha, ¿está casada con Michael, la belleza número uno en la escuela?  Maldita sea, esto se parece mucho a un sueño.

Abrió el agua caliente y se metió en la bañera, después de relajarse un rato, se puso de pie de un salto, tomó el jabón líquido con fragancia de lavanda y lo vertió en el agua.  Se recostó en la bañera y cerró los ojos, inhalando la dulce y sexy fragancia.

Mientras cerraba los ojos, sus pensamientos se volvieron locos, ¿por qué de repente accedió a casarse con ella?  ¿Será que está ocultando su preferencia por los hombres a su familia?  Es posible, por supuesto, ¿cómo puede decirles que es gay?  Su madre tendrá un infarto.

Bueno, no importa si se lo está ocultando o no, lo que importa ahora es que ella es su esposa, sonrió ante ese pensamiento, Sasha Brown, volvió a sonreír y se levantó de la bañera antes de encender la ducha para enjuagar su cuerpo.  Agarró una toalla y se la ató alrededor del pecho mientras salía de la bañera.  Agarró otro para secarse el cabello mientras estaba de pie frente al espejo.

Ella no puede decir lo que sucederá esta noche, si él la tocará o no, pero sea lo que sea, se alegrará si se duerme en sus brazos, de inhalar ese dulce aroma suyo que puede  prescindir y haberla vuelto loca desde hoy de tener que pararse y sentarse a su lado.

Sacó una lencería negra del bolso que llevaba al baño y se la puso, también se aplicó su desodorante y su perfume.  Se cepilló el cabello y luego se aplicó su crema facial, miró su vista lateral en el espejo y sonrió, es hermosa, lo sabe, por eso a los chicos les cuesta dejarla ir pero no fue satisfactorio ya que ella no podía llamar la atención del más guapo de la escuela, Michael Brown.

Todo eso ha cambiado ahora, ella es su esposa y va a hacer todo lo que esté a su alcance para que él vea la bondad en las mujeres.  Ella sonrió ante ese pensamiento antes de darse una última mirada al espejo y asintió, satisfecha con lo que vio, salió del baño al dormitorio.

Conmocionada al ver a su esposo en el dormitorio, sentado en el taburete con su computadora portátil sobre el escritorio, ella jadeó, ¿cuándo entró?  Bueno, no importa, él está aquí ahora, se paró en la puerta del baño y lo miró fijamente, queriendo saber si él la mirará, pero él parece tan absorto en lo que sea que esté escribiendo en su computadora portátil, hizo un puchero y caminó.  a su tocador y se sentó, fingiendo volver a cepillar su cabello mientras lo miraba a través del espejo, maldita sea, su espalda es impresionante, se preguntó cómo se verá sin la camisa.

Ella lo vio guardar su archivo y apagar la computadora portátil, es hora, pensó y se giró para mirarlo, él también estaba frente a ella con las piernas cruzadas, su cabello negro tan plano en la cabeza y brillante como si acabara de salir de la ducha, su camisa estaba entreabierta, sus ojos azul cristal ardiendo en los de ella y sus labios rosados, oh dulces y sexy, cerrados en una delgada línea, le resultó difícil dejar de mirarlo y fue sacada de su ensueño con el sonido de  él aclarándose la garganta.

Él sonrió levemente, viendo esos labios arqueados hacia arriba, Sasha sintió que su corazón latía cada vez más. -Creo que ya terminaste y te relajaste-, su profunda y sensacional voz penetró en su mente.

Ella lo miró fijamente y asintió levemente y él asintió con la cabeza demasiado -bien, por supuesto que quiero que lo que tengo que decir ahora se hunda en lo profundo- se detuvo por un momento -siendo mi esposa viene con algunas reglas y deberías cumplirlas,  no tendremos problemas-

¿Reglas?  ¿Reglas en el matrimonio?  ¿Desde cuándo eso se convirtió en algo?  Sasha pensó, pero ahora no puede cuestionarlo.

-Tres reglas:

No me hables

No me toques

Manténte fuera de mis asuntos-

Los ojos de Sasha se abrieron en estado de shock, ¿qué sería el matrimonio sin esas cosas?  ¿Cómo puede estar casada con él si no se le permite hablar con él?  ¿No tienes permitido tocarlo?  Olvídate del negocio, ella puede manejarlo, pero ¿los otros dos?

Michael miró fijamente la expresión de sus ojos abiertos sin pronunciar una sola palabra de nuevo, cuando estuvo seguro de que sus palabras se habían asimilado, se puso de pie y caminó hacia el baño, dejándola mirando fijamente al espacio vacío en estado de shock.

Ella lo miró mientras salía del baño, había gotas de agua en su cuerpo y una toalla alrededor de su pecho, entró en su vestidor y ella no sabía que estaba allí cuando entró.  Después de tres minutos, salió y se dirigió directamente a la cama.  Se acostó en su propio lado de la cama y apagó la lámpara de la cama.

Sasha se sentó mirándolo, ¿es real?  ¿En qué se ha metido?  ¿Qué tipo de matrimonio será este?  No pudo pensar en todas las posibilidades y lentamente caminó hacia la cama, se acostó de costado y lo miró fijamente, parecía haberse quedado dormido inmediatamente su cabeza tocó la almohada y no podía creer nada.  Extendió su mano para tocarlo, pero luego se congeló en el aire cuando su segunda regla sonó en su mente 'no me toques', tragó y lentamente dejó caer su mano, le dio la espalda y apagó la  lámpara mientras rezaba para que la noche fuera sólo un sueño.