Sin Rastro De Ti

Vivir hospital en hospital no es una buena idea, asi empiezas a odiar al mundo, luego sales a ese mundo que odias para disfrutarlo intensamente hasta ya no poder mas, esa era mi meta, la meta de la Abogada Lindsay Swan, estuvo bien hasta que el apareció Pense que ella podía ayudarme, como un iluso me enamore de una mujer que no quiere a nadie y utiliza a todos, asi me convertí en su esclavo, cediendo a su juego, matando la inocencia que habia en mi, si mis padres fueron unos malnacidos, ella era un demonio que nunca debí conocer, nada en esta vida es como uno quiere y ahora me convertí en el demonio que no la dejare irse jamás, como que me llamo Oscar Rengel

El destino hace una nueva jugada en la vida de Crys y Bastian, después de haber acabado con la amenaza que era Annethe, ahora tendrán que enfrentar los miedos y traiciones que les dejó esa mala experiencia. El último año escolar llega y Bastian está dispuesto a todo por recuperar a Crys, sin saber que ella guarda un secreto que lo puede destruir. Comenzando a poner en tela de juicio si de verdad vale la pena luchar por algo que solo lastima a muchas personas. ¿Podrá Bastian recuperar a la persona que más ama en el mundo? y lo más importante... ¿Podrán superar el último año escolar? Una nueva aventura comienza Un nuevo año escolar los pondrá por última vez a prueba. Y un nuevo juego da comienzo dando entrada a la pasión, el deseo y el romance.

Ella: Su novio la engañó con su mejor amiga un día antes de Navidad. Él: Su novia murió en un accidente de avión rumbo a Londres un día antes de Navidad. Mientras Crys está decidida a buscar una aventura llena de pasión y diversión, Bastian quien está cansado de ser el blanco perfecto de burla de sus amigos, intentará frustrar las maquinaciones de su padre; con quien ha hecho una apuesta, demostrándole que es capaz de tener una relación seria y formal. Aunque un noviazgo es lo menos que necesitan ambos en sus vidas, todo cambiará cuando estos dos corazones con diferentes sueños se encuentren dando como resultado un mentiroso plan; ella se hará pasar por su novia, a cambio de que él le proporcione diversión, teniendo como fecha límite... El invierno. Un secreto bañado en sangre, y un romance que lleva años fraguándose los pondrán al límite de sus emociones justo antes de que el año termine. De algo están seguros; y es que harán todo lo posible por no enamorarse en el proceso.

Él es una celebridad, el chico malo del rock, y sólo quiere pasarla bien. Ella es una extranjera huyendo del peor error de su vida y sólo quiere volver a casa. Una tormenta inesperada los reunirá, un encuentro casual que los cambiará para siempre.

Después de todos los obstáculos que Crys y Bastian han superado a lo largo de su relación, y justo cuando creían que todo había vuelto a la normalidad, aparece alguien que los hará dudar de su amor. Cuando Bastian conoce a la tierna e inocente Annethe, su actitud positiva y su forma de ver la vida llaman su atención, sin saber que aquella chica angelical esconde un secreto oscuro. Mientras tanto, Crys se cuestionará si seguir con Bastian es lo que realmente quiere. ¿Podrán Crys y Bastian salvar su relación? y ¿Podrán desenmascarar al diablo disfrazado de ángel? Quien ha tramado un terrible plan que cambiará para siempre el futuro de todos. Un nuevo juego comienza, un nuevo desafío, y una prueba que pondrá en balance el amor verdadero y la aventura del nuevo.

Adella Howard, una cantante de música Pop muy reconocida. Tiene secretos como cualquier otro famoso y quiere mantenerlos en la oscuridad y Dominic Brinmor es un obstáculo que aparece en su vida de imprevisto, él es caliente, un cantante de Rock que provoca una gran pasión que quiere evitar pero no puede. Dominic cree que está en el mejor momento de su vida, es propietario de un club nocturno y su banda está en preparativos de dar un gran concierto en uno de los festivales más famosos del mundo. Por circunstancias del destino conoce a una hermosa rubia que lo obsesiona, utilizará el chantaje, ya que alejarse no parece ser una opción.

Elthon es un corredor de autos al que nunca le ha ido bien en el amor, su padre sufre un percance con su salud lo que hizo que se deba hacer cargo de las empresas. Pero para completar sus responsabilidades desea ser padre, y acude a una clínica de fertilidad, dónde coincide con la que tiempo después le enseña qué vale la pena esperar que tus plegarias sean escuchadas. Yahira una mujer latina, con muchos bríos y ganas de comerse el mundo, pero termina siendo lo que menos desea, solo por su familia, y fue cuando conoció quien sería la persona que la ayudara, siendo lo que nunca imaginó.

Natalie Owen, siempre soñó estudiar en la Academia Naval, y luego ingresar al Cuerpo de Marines, nunca tuvo otro proyecto, otra meta que cumplir, sólo su sueño de niña, desde pequeña viajó por diversas bases militares donde asignaban a su padre, lamentablemente cuando cumplió los doce años su padre fue asesinado en una misión, pero eso no frustró su sueño, sino que se empeñó a que su madre la autorizara para ingresar.El día que ingresó fue uno de los momentos más felices de su vida, ya estaba más cerca de lograr su ansiada meta. Allí conoce al Capitán Morgan Clark, de quien se enamora a primera vista, sólo que hay un problema, está casado y ama profundamente a su esposa, pero ¿Tal vez sucedan cosas que les pueda permitir estar juntos o no? El destino a veces se ensaña sin razón y por más que intentes escapar, las circunstancias te persiguen. Natalie vivirá los momentos más desesperantes y de cada caída, se levantará con más fuerza, no se dejará vencer y que no sería capaz de hacer Por Amor a ti.Prohibida la reproducción total o parcial de la presente obra.Todos los derechos reservados, esta obra se encuentra registrada en Safe Creative bajo el Nro. 1905301035128.

Es una noche cualquiera en la ciudad de Nueva York. El bullicio habitual, las luces eternas, el murmullo constante de una ciudad que nunca duerme. Pero para dos personas, aquella noche no era como cualquier otra. Un bar escondido en el East Village, luces tenues, jazz suave de fondo. Ella, con mirada distante y copa en mano, parecía esperar algo... o a alguien. Él, con pasos seguros y una chaqueta empapada por la lluvia, entró sin saber que estaba a punto de cambiar su vida. Aquel encuentro entre Alexa Amery y Landon Lombardi no fue una coincidencia. No del todo. Porque aunque no se conocían, aunque sus caminos parecían completamente ajenos... estaban destinados a cruzarse. Y no por azar. Después de todo, les gustara o no, eran socios. Y lo que estaba a punto de comenzar no era solo una historia. Era el inicio de algo más grande. LA REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL DE ESTE MATERIAL QUEDA PROHIBIDA. LA HISTORIA ESTA REGISTRADA EN SAFE CREATIVE . Copyright © 2006014207303

Estaba sentada en el Ayuntamiento, a punto de firmar ese maldito certificado de vínculo de compañero con Diego, el Alfa de las Garras Lunares del Este, cuando su teléfono vibró. Le dio una mirada, tras la cual se levantó como si lo que estábamos haciendo solo fuera otro trámite más. Ni siquiera se inmutó cuando dijo: —Surgió algo, dejemos la firma del vínculo para otro día, ¿sí? Y así como así, se fue. Me dejó sentada sola, rodeada de parejas vinculadas, todas irradiando esa vibra empalagosa de «felices para siempre». ¿Por qué? Porque Elena, su querida compañerita de manada desde la infancia, se había torcido el tobillo durante el entrenamiento de velocidad de manada, tratando de seguir el ritmo de los lobos avanzados cuando apenas había pasado los aspectos básicos. Diez minutos después, recibí un mensaje: «La lesión de Elena es medio seria y tengo que quedarme con ella. Movamos la boda, ¿está bien?» Solo era una vez más, como tantas, que Diego la elegía a ella por encima de mí. Pero esta vez… No hubo lágrimas, súplicas o rabia de mi parte. La empleada me dirigió una mirada silenciosa, como si ya supiera cómo terminaba la historia. —Señora... ¿aún desea proceder? Saqué mi teléfono, no esperé a que él cambiara de opinión. Negué con la cabeza y marqué a casa. En el momento en que mi hermana Beta contestó, dije: —Dile al Alfa, a papá, que regresaré a La Cresta hoy. Hubo una pausa, tras la cual me preguntó: —¿Estás segura? —Sí —dije, poniéndome de pie, con voz firme—. Ya terminé aquí. Y, así como así, me fui. No solo del edificio, sino lejos de él.