ANDREA.-
¿Cómo pude ser tas estúpida? ¿Cómo pude besarlo? ¿En que estabas pensando Andrea Valencia?, lanzo el bandolero en el sofá y me tumbo boca abajo, escucho mi celular sonar una y otra vez.
Seguro pensara que estoy muerta por él, me repongo y descanso mi cuerpo en el respaldo de mi sofá, mi mente vuelve a ese momento y toco mis labios con mis dedos, ¡Dios! Y lo peor de todo es que besa divinamente, pero no.
Ahora quede al descubierto, el alcohol saca tus inhibiciones más profundas y hoy saco mi deseo de besar a Miguel Ángel que voy a hacer los próximos días y el próximo mes que estaré siempre a solas con él.
Tomo el teléfono de mi casa y marco el número de Melissa.
- ¡Buenas noches! -La voz de Melissa se escuchaba agitada, separo el auricular y le pregunto-
- Hola, soy yo ¿Qué te pasa?
- Amiga… ¡Uhm!... estaba ocupada
- Estabas ocupa… ¡Ooooohh!, lo siento tanto, pero ustedes parecen conejos, a toda hora
- ¿Para qué me llamabas?
- Quería contarte algo, pero ya se me quitaron las g