ANDREA.-
Estoy despierta desde las cinco y media de la mañana, me di una ducha, prepare el desayuno y sigo con un humor de perros por la invitación de Miguel a Clara, miro el reloj y son las siete de la mañana, voy a mi habitación Sarah sigue durmiendo, entro al baño y pongo a llenar la tina con agua caliente, cuando Sarah despierte el agua estará tibia, tomo del lavabo el frasco con sales de jazmín ¡Mmm! Huele delicioso, tomo las rosas y comienzo a quitarle los pétalos y los hechos sobre la tina, cierro la llave y salgo para despertar a Sarah.
- Sarah despierta ya dormiste lo suficiente
- ¡uhm! Cinco minutos más por favor –Dice balbuceando, me rio-
- Hoy es tu boda, -abre los ojos, se levanta rápidamente-
- ¡Por dios! Hoy me voy a casar -Le doy una gran sonrisa-
- ¡Así es hermanita!, levántate que el desayuno ya está listo, debes entrar a la tina y en dos horas llegaran la estilista y la maquilladora.
- Aunque no tengo hambre, estoy muy nerviosa
- Come aunque sea un poco la recepción