— Cedric, ya bájame, me estoy mareando, —Se quejó Jessie aún riendo.
— No puedo, estoy muy feliz, al fin te encontré.
— No seas tonto...
— Me defendiste de mi madre.
— No fue nada tan heroico, no exageres.
— Para mí lo fue Jess. —Afirmó él deteniéndose, su expresión seria.
— ¿Realmente era tan difícil para ti?
— He vivido toda la vida en un círculo de amor–odio por ellos, es estúpido, pero todo lo que he hecho, bueno o malo es para que me noten, pero nunca lo hacen, tú has sido lo único que he querido por mí, no por ellos y aun así sentía temor a que te conocieran, a que se enteraran porque sabía que no te querrían, pero no quería perderte y temía que tú no soportaras la presión o que no quisieras estar realmente conmigo sino que solo quisieras mi dinero y...
— Ced... Solo han sido tres semanas, todo esto va muy rápido y eso que aún no me acuesto contigo, ahora me da miedo hacerlo ¿Y si salgo embarazada? —fingió un escalofrió de terror y luego sonrió. —Lo cierto es que me gustas realm