Los trabajadores no se encuentran en esta área, hoy es domingo son pocos y por la hora creo que todos se han retirado a descansar, intento guardar la calma, respiro, camino de un lado a otro llamándola, por más que insisto no obtengo respuesta, regreso a donde se encuentra la construcción principal.
-Mamá – grita alguien y no entiendo a quien llama y luego escucho cerca – mamá. Alzo la cabeza y veo corriendo a Amarilis hacia donde me encuentro, siento alivio de verla cerca – mamá – dice cuando se cuelga de mi cuello y la escucho cerquita de mi oído – lo lamento.
-¿Cómo me llamaste? – cuestiono, mi estomago se hace un nudo, algo extraño se forma en mi corazón haciendo que me atragante - ¿Amarilis? – cuestiono
-Papá me regaño porque no te avise que me iba con él – veo su rostro que se encuentra a milímetros de mí.
-¿Cómo te llamo? – le pregunto a Óscar sorprendida de lo que la escuche decir.
-Calma – me dice, niego con la cabeza, ni siquiera soy capaz de cuidarla y ella me co