Cap. 14 Lo que pasó en la fiesta
El corazón de Dafne estaba apretado, miraba a todos lados esperando ver algo peculiar que le diera señales de lo que pasaba y no veía nada.
Lauren decidió ir por los baños y descubrió que había una salida abierta, caminó para ver el sitio y la parte trasera daba a una calle, si alguien se había acercado, tomó la salida y desapareció.
Volvió pensativo, veía tensa a Dafne, ¿sería acaso que el marido era un hombre malo? Se acercó a ella.
—No hay nadie por allá.
Dafne se restregaba las manos y él le preguntó:
—¿Ese hombre es malo?
—Quiero ir a casa…
—Falta poco para el pastel, espera.
Dafne veía la tristeza en su hijo y se acercó a él:
—Pronto van a traer el pastel y romper la piñata.
—¿Mi papá me envió a buscar?
—Hijo, tu padre nunca haría eso, porque él primero se comunicaría conmigo.
—Pero él dijo que…
Lauren lo alzó y le dijo:
—Dijiste que deseabas que yo fuera tu papá, ¿cambiaste de idea?
—Sí quiero, pero… ¿Y si mi papá aparece?
Lauren le dijo entonces:
—Tendrías dos