EL AMOR ESTÁ EN EL AIRE.
EL AMOR ESTÁ EN EL AIRE.
―¿De verdad vamos a subir allí? ―April miro el aparato que no tenía ni siquiera un motor y su estómago se tensó ―Cielo, te amo… pero, no creo que lo suficiente como para morir.
Marcelo entrecerró los ojos y camino hacia ella, rodeo su cintura y la atrajo a su cuerpo para robarle un beso.
―Entonces su amor por mi señora Mancini no es verdadero ―dijo con expresión agraviada ―Se supone que estaremos juntos hasta la muerte y tú huyes a la primera.
Marcelo y April estaban en un campo abierto. Él había preparado una sorpresa especial antes de volver a Chicago.
―Pero eso no tiene motor ―se quejó mirando el planeador.
―Nos llevará aquel ―Marcelo señalo la avioneta y al piloto que esperaba por ellos ―Además, tu marido sabe manejarlo. ―le dio un pico en los labios y la llevo hasta el planeador para ayudarla a subir. ―No tengas miedo, yo cuido de ti.
Con una sonrisa en su rostro, Marcelo ayudo a April a abrocharse el cinturón de seguridad, mientras le explicaba br