La rubia abrió los ojos con evidente sorpresa.
—¿Qué? ¿No te lo esperabas? — Ashley se acercó y de pronto agarro con fuerza su barbilla — Es una de las ventajas de llevar una vida patética.
Diciendo esto se dio la vuelta y salió. El susurro de la furiosa mujer llego a sus oídos, su amiga la miro c