CAPÍTULO 20.
Después de regresar al departamento, Stella todavía se sentía mareada e incómoda.
―Stella, ¿te sientes bien? ―se apresuró a llevarle un vaso de agua y le pidió que descansara.
―Sí. No es nada, debe ser el cansancio.
―No tienes buen aspecto. ¿Quieres que vayamos al hospital? Llamaré