Él escuchó el sonido de una notificación y saco el teléfono solo para ver que Stella le había hecho una transferencia.
―Stella, ¿Qué esto? ―apretó la mandíbula y la miro con los ojos entrecerrados.
Ella sonrió y le devolvió la mirada, solo que cargada de frialdad, no pensaba quedarse atrás en abso