Mire dormir a Jay, se veían tan inocente, bastardo! Le di un golpe en el brazo y el se levantó de inmediato
- Que paso?-
Me preguntó, se veía bastante alerta.
- Nada! Simplemente no puedo soportar verte tan tranquilo! –
El me sonrió
- De verdad te vas a enojar por eso? Olvidemoslo! Ven y dame un beso –
Yo lo fulmine con la mirada y me acosté dándole la espalda, senti la mano de Jay acariciándo mi vientre.
- Cómo sigas voy a partirte un dedo, y hablo enserio!-
Lo amenace, el se rió y quito la mano inmediatamente.
- Eres tan malvada! Yo solo quiero estar con mi esposa, dame amor Gabriela! –
Yo me di media vuelta
- Una patada es lo que he mereces! Tengo rabia contigo!-
El me acerco, y me dio un beso en la cabeza.
- Te invito a una cena, solo los dos, quiero disfrutar de tu compañía –
Yo me mordí el labio inferior y asenti.
*
Era domingo, Jay había mandado a las niñas con Tony, según el, iba a consentirme en lo que yo quisiera! En estos momentos es cuando me recriminó no ser una chica que