Nunca imaginé que un día tan normal se convertiría en el peor de mi vida, Era un día soleado; el tipo de día que te hace querer salir a caminar y disfrutar del aire fresco, Me desperté temprano, como siempre, y me preparé para un día de trabajo en casa.
Mi estudio, un pequeño rincón lleno de mis bocetos y pinturas, era mi refugio, Allí, me sentía libre, creativa, y en control de mi vida, Pero esa sensación de control se desvanecería en un instante, La mañana transcurrió tranquila, David, mi esposo, se despidió con un beso apresurado antes de salir a la oficina, Siempre estaba tan ocupado, atrapado en su mundo, A veces me preguntaba si realmente me veía, o si me convertía en un mueble en su vida, Pero hoy no quería pensar en eso, Tenía un proyecto que me apasionaba, y estaba decidida a terminarlo. Mientras trabajaba, mi mente divagaba, Recordé cómo conocí a David en la universidad, Él era el chico popular, lleno de carisma, y yo, la chica tímida que siempre se sentaba en la esquina, Nos hicimos amigos, y pronto me di cuenta de que había encontrado a alguien especial, Sin embargo, con el tiempo, esa magia se desvaneció, y me encontraba sola en una relación que alguna vez fue mi refugio. La tarde pasó sin incidentes, Justo cuando estaba a punto de darme un respiro, el teléfono sonó, Era Laura, mi mejor amiga, Su voz era una mezcla de alegría y preocupación. _ ¡Feliz cumpleaños, Clara! _ exclamó. Justo en ese momento, recordé que era mi cumpleaños. _ Gracias, Laura, No estoy segura de que sea tan feliz _ respondí, riendo un poco. _ ¿Por qué no sales esta noche? Te invito a cenar _ sugirió. Me encantó la idea, pero también me sentía culpable por dejar mi trabajo a un lado. _ Tal vez después de terminar este proyecto _ le dije, intentando ser diplomática. La conversación continuó, y aunque traté de ocultarlo, sentí que algo en Laura no estaba bien. _ Clara, ¿estás bien? Te noto un poco distante _ comentó, y no pude evitar sentir que había algo más detrás de sus palabras. _ Solo estoy un poco ocupada, ya sabes cómo es _ respondí, tratando de restarle importancia. Finalmente, colgamos, y volví a concentrarme en mi trabajo , Pero el ligero nudo en mi estómago me acompañó el resto del día, La tarde se convirtió en noche, y decidí preparar una cena especial para David , Esperaba que una buena comida ayudara a desconectar de la rutina , Cuando David llegó a casa, estaba ansioso por sorprenderlo. _ ¡Feliz cumpleaños! _ dijo mientras entraba, pero su entusiasmo se desvaneció rápidamente al ver la mesa. La cena no tuvo el efecto que esperaba; David estaba más interesado en su teléfono que en lo que había preparado, Intenté no dejar que eso me afectara, pero la decepción se acumulaba, Después de la cena, decidí darme un tiempo en mi estudio. La noche estaba tranquila, y mientras trabajaba, la sensación de que algo estaba mal seguía acechando en el fondo de mi mente, La rutina se había vuelto asfixiante, como si estuviera atrapada en un ciclo del que no podía escapar, De repente, un golpe fuerte en la puerta me sacó de mis pensamientos, Miré el reloj; era tarde, ¿Quién podría ser a esta hora? Me acerqué a la puerta, el corazón latiendo con fuerza Al abrirla, me encontré con un grupo de policías, Sus uniformes oscuros y sus miradas serias me hicieron sentir un escalofrío recorrer mi espalda. _ ¿Clara Martínez? _ preguntó uno de ellos, y mi corazón se detuvo. _ Sí, soy yo _ respondí, sintiendo que algo dentro de mí se rompía. _ Estamos aquí para arrestarla, Está acusada de un delito grave _ continuó, y mis piernas temblaron. _ ¿Qué? ¿De qué delito hablan? _ pregunté, mi voz apenas un susurro. La incredulidad se apoderó de mí , David apareció detrás de mí, su expresión cambiando de sorpresa a confusión. _ ¿Qué está pasando? _ preguntó, pero los policías no respondieron, Sentí que el mundo se desmoronaba a mi alrededor. _ ¡Esto es un error! _ grité, pero mis palabras parecían perderse en el aire, Mientras me esposaban, miré a David, buscando alguna señal de apoyo, de comprensión Pero en su rostro vi algo que me golpeó con más fuerza que las esposas: incredulidad ,No podía creer que me estuvieran arrestando, y mucho menos que él no me creyera. La traición se instaló en mi corazón como un veneno , Los policías me llevaron fuera de mi casa, y el frío de la noche me envolvió, La luz de las farolas iluminaba la escena, y la visión de mi hogar, mi refugio, se desvanecía mientras me alejaban, Todo lo que había construido, todo lo que había soñado, se estaba desmoronando. En el camino hacia la comisaría, intenté recordar los últimos días, La última vez que reí, la última vez que sentí que todo estaba bien Pero todo lo que podía pensar era en la traición de David y la injusticia de mi situación, ¿Cómo había llegado a esto? ¿Qué había hecho para merecerlo? Una vez en la comisaría, el frío y la dureza del lugar me golpearon con fuerza, Me llevaron a una celda, y el sonido de la puerta cerrándose resonó en mis oídos. La sensación de claustrofobia me invadió; estaba atrapada en un lugar donde nunca debería estar, Mientras me sentaba en el banco de la celda, la realidad comenzó a hundirse en mí. ¿Qué había pasado con mi vida? ¿Por qué nadie creía en mi inocencia? Comencé a recordar mi infancia, llena de risas y amor, Mis padres siempre me apoyaron, me enseñaron a luchar por mis sueños Pero ahora, todo eso parecía un eco lejano, La vida que había construido se desvanecía, y la soledad me envolvía, Reflexioné sobre mi relación con David, Habíamos compartido tantos momentos juntos, pero ahora me sentía como una extraña, La traición y la desconfianza se convirtieron en una carga pesada, ¿Cómo había llegado a este punto? Pasaron las horas, y la oscuridad de la celda se convirtió en mi única compañía ,A pesar del miedo y la desesperación, algo dentro de mí comenzó a despertar No podía dejar que esto definiera mi vida Tenía que luchar, encontrar la verdad detrás de estas acusaciones. La determinación comenzó a arder en mi interior , Mientras miraba a través de los barrotes, sentí que algo había cambiado en mí, La injusticia que enfrentaba no podía ser el final de mi historia, Tenía que encontrar la manera de salir de este lugar y descubrir quién había orquestado mi caída, La lucha apenas comenzaba.