Leyna:

Nos encontrábamos en los pasillos de la escuela, a decir verdad Sacha se encontraba muy tranquila para aver llorando por horas ayer

—Vamos a ver a los chicos de atletismo escuche que estaban entrenando —lo que sugirió Sacha me sorprendió 

—Estás segura de eso — le dije mientras la miraba algo preocupada

—Si, no había dicho Tzuki que fuéramos a recogerlo para ir a almorzar juntos — me dio una sonrisa alegre pero se notaba aún algo triste 

—Si tienes razón, vamos 

—Si, vamos!! y ¿ a dónde vamos? — dijo Tailer acercándose al lado de Sacha 

—Oh perfecto ven con nosotras, vamos a ir por Tzuki al campo de entrenamiento —le dije un poco emocionada ya que si Tailer estaba con nosotras, Sacha se iría a distraer un poco con él, sé que a él le gusta ella, aparte que se le nota bastante cuando la ve, se lo dije una vez, pero Sacha en ese momento rechazó esa sugerencia, por el momento no se como se siente sobre eso 

—Por supuesto, entonces vamos — nos dice Tailer con felicidad, agarro la mano de Sacha y la atrajo así a él 

—Bien, vamos pues —le sonríe Sacha, aunque intentaba ocultar su emoción, se que estaba nerviosa de que Tailer estuviera con ella, yo solo sonreí y caminé tras ellos

Al llegar al campo de entrenamiento, que era muy grande a decir verdad, vi a Tzuki, se miraba lindo tenía una toalla sobre el hombro que la utilizaba para secarse el rostro y su lindo cabello color cobrizo que se le pega un poco en la frente por el sudor, casi siempre lo trae despeinado la verdad eso lo hace mirar algo sexi, traía una camiseta  sin mangas oscura que hacía resaltar su piel blanca y sus lindos bíceps, con unos short que le llegaban un poco arriba de la rodilla y eso si que lo hace ver súper sexi 

— cofh, cofh — sonaba una tos para nada real que me hizo despertar de mi sueño, volte a ver y era Sacha que se encontraba aun lado de Tailer casi abrazados, mirándome fijamente —Te lo vas a acabar 

— q..qué, de qué hablas claro que no —dije medio tartamudeando y me arrepentí de haberlo hecho, Tailer soltó unas carcajadas, me sentí un poco avergonzada, sentía que mi cara se ponía roja, volteo a ver a Tzuki y sus grandes ojos esmeralda me estaban viendo atentamente, sonrió y él me devuelve la sonrisa, rápidamente bajé la mirada, el estaba casi al otro lado del campo y nosotros estábamos por las bancas, espero que no haya escuchado nada, se empezó a dirigir hacia nosotros.

Tzuki: 

—Listo, eso es todo por hoy!! — se escuchó al entrenador gritar, me fui deteniendo poco a poco hasta parar.

Ciertamente, no me acuerdo cuantas vueltas di, pero se dificulta intentar llevar el ritmo de estos chicos, obviamente se miraría raro que fuera más rápido que un simple humano, de repente sentí que tres chicos se estaban acercando por detrás, es fácil sentir a las personas, ya que irradian calor extremo por todo su cuerpo

—Cuidado Tzuki, para que te refresca tantito—me grita Austin, un chico del equipo, que justamente llegó por detrás echando agua a mi cabeza, sonreí calmadamente ya que se que lo hacen por diversión, para una persona normal esto le refrescará después de dar una 30 vueltas, pero yo no lo necesitaba no siento cansancio alguno 

— Gracias chicos—les dije mientras me secaba el agua de la cara, ellos siguieron corriendo así los otros chicos, para refrescarlos 

De repente sentí una mirada que me recorrió todo el cuerpo, la sensación benia de las bancas, sabia quien era, pero finjo no ver nada, su mirada se sentía intensa, esa sensación se quedó por un buen rato en mi cuerpo era algo que me agradaba

—cofh, cofh —se escuchó, esa tos era obviamente falso — Te lo vas a acabar — era Sacha que se dirige a Leyna, se encontraba en las bancas junto a Tailer, que la estaba abrazando de la cintura

— q..qué, de qué hablas claro que no — se escuchó una voz tartamudear, era Leyna, dirijo mi mirada a su dirección, se miraba linda, con su uniforme, que por su altura le quedaba algo corto y eso le hacía notar sus largas piernas blancas, la recorrí con la mirada, traía su cabello recogido en una coleta, de repente me volteó a ver, se miraba muy linda, me sonrió y no pude evitar sonreír, estaba un poco roja de las mejillas y rápidamente agachó la mirada.

Me acerco a ellos

—Hola Tzuki, ya terminaste tu entrenamiento —me pregunto Tailer con un tono burlón en su voz, y entendía por qué, es algo estupido intentar estar en un deporte en donde tienes que fingir todo el tiempo 

—Si, de hecho me voy a cambiar —les mencioné  mientras subía los escalones y me acercaba a Leyna, que al parecer aún seguía un poco roja—¿Te sientes mal? Estas un poco roja —le dije mientras acercaba mi mano para tocar su frente aunque era un pretexto para tocarla, era cálida, noté que se sonrojo más y volteó la cara 

— No, me encuentro bien —dijo un poco tímida, ese lado de ella me gusta mucho, me despierta una ganas de *poseerla y tenerla sola para mí* controlate, *cierto*, me acerqué y le di un beso en sus cálidas mejillas 

—Tzuki, tengo hambre, así que date prisa, te hemos estado esperando por un buen rato — Oigo a sacha, volteo a verla y esta  haciendo pucheros

— Si tienes razón, bueno me iré a cambiar— dije apartándome de ellos y dirigiéndose a los vestidores.

Nota del autor: *este signo se usa cuando la oscuridad de Tzuki habla.