ZADE
Salgo de casa una vez que me he duchado, intentando ponerme en contacto con Damien de nuevo. Me subo a mi motocicleta, preguntándome si le ha pasado algo cuando me llama de regreso. Contesto el teléfono sin responder por si acaso no es él y espero a que hable primero.
"Jefe". Él está bien y solo.
"¿Dónde has estado?".
"Me han atacado... Estoy bien, pero he perdido mucha sangre. Conseguí escapar y llegar a casa, pero... No estoy seguro de qué es, pero no me estoy curando".
"Ya lo averiguaremos. Me dirijo a la calle doce y siete. Encuéntrame allí. Es urgente. Lleva a Anthony".
Gruñe en respuesta y frunzo el ceño mientras cuelgo.
Estos ataques han sido cuidadosamente pensados. Me detengo en el garaje, ignorando la pila de cartas que han sido empujadas a través del buzón, antes de estacionar la camioneta dentro y caminar a través del garaje hacia el otro lado, donde tengo un todoterreno negro, uno con ventanas a prueba de balas escondidas en la parte trasera. Uno de mis cinco v