"¡Vayan!”.

Dieciocho discípulos de Longmen fueron inmediatamente tras Jason por orden de Morgan.

Algunos de ellos empuñaban espadas, mientras que otros empuñaban grilletes. Querían poner a Jason en su lugar antes que nada.

Harvey tendría la última palabra sobre si Jason vivía o moría.

Los de familias adineradas cambiaron inmediatamente de expresión ante semejante espectáculo. Sabían muy bien que una gran pelea estaba a punto de comenzar.

"¡Atrás!".

Mateo dio un paso adelante y quitó el seguro de su arma antes de apretar el gatillo hacia los discípulos que se acercaban.

¡Bam, bam, bam!

Las balas salieron volando por todas partes. Los discípulos no tuvieron tiempo de reaccionar y todos recibieron disparos en un instante.

¡Bam, bam, bam!

Cuando Mateo terminó de disparar, se abalanzó hacia adelante y mandó a volar a los discípulos con sus puños.

En un solo momento, todos los discípulos Longmen que tomaron medidas fueron golpeados.

Los discípulos que quedaban mostraron expresion